Abuja, NIGERIA
(Agencia Fides, 07/07/2014) - “Las viudas sufren terriblemente por
la pérdida de su marido, son marginadas, la mayor parte de sus
familiares las aleja de sí, abandonándolas a su suerte. Tenemos la
obligación de cuidar de los pobres y los necesitados”, dice Su
Exc. Mons. Oliver Dashe Doeme, Obispo de Maiduguri, capital del
estado de Borno, en el norte de Nigeria, al presentar el programa
diocesano de ayuda y asistencia a más de dos mil mujeres que han
perdido a sus maridos, la mayoría a causa de la violencia de la
secta islamista Boko Haram.
Después de una
primera ayuda de emergencia, el plan es hacer que las mujeres sean
autosuficientes, ayudándoles a crear una pequeña empresa. “Nuestro
principal objetivo es ayudarlas a que puedan cuidar de sus hijos”,
ha dicho Mons. Doeme. “La mayoría de estas mujeres se quedan solas
con seis, siete, diez hijos que mantener y sin trabajo”.
El programa está
dirigido a mujeres del estado de Borno, pero también de Yobe, y de
parte de Adamawa, que son las zonas más afectadas por las acciones
de Boko Haram.