''Como
sabemos al menos cuatro de los Padres Sinodales incluidos en la lista
de firmantes lo han desmentido (Angelo Scola, André Vingt-Trois, Mauro
Piacenza, Péter Erdő).
El Cardenal Pell ha declarado que una carta que se había entregado al Papa
era reservada y debía permanecer así y que lo publicado no
correspondía, ni en el texto, ni en las firmas, a lo entregado.
Yo
añado que, en sustancia, las dificultades expresadas en la carta se
habían mencionado el lunes por la tarde en el Aula, como ya dije, si
bien no tan amplia y detalladamente. Como sabemos el Secretario General y
el Papa respondieron con claridad al día siguiente por la mañana.
Por
lo tanto, el que ha difundido, días después, este texto y esta lista de
firmas para que se publicasen ha ocasionado un trastorno no deseado por
los firmantes (al menos por algunos de los más autorizados).
Es necesario, pues, no dejarse condicionar.
No
hay que maravillarse de que se puedan hacer observaciones sobre la
metodología del Sínodo, que es nueva. Pero una vez establecida, hay que
comprometerse a seguirla de la mejor manera posible. Es lo que está
sucediendo. Hay una enorme colaboración para que el camino del Sínodo
proceda bien.
Se
puede notar, que algunos de los “firmantes” también son Moderadores
elegidos por los Círculos y que trabajan intensamente. El clima general
de la Asamblea es, sin lugar a dudas, positivo.
El Cardenal Napier, por su parte, me ha pedido expresamente que
desmintiera cuanto se ha publicado en una entrevista suya (Crux) donde
hay una afirmación que no corresponde absolutamente a lo que piensa. Se
trata de la siguiente:
“A
propósito de la composición de la ‘’Comisión de los 10” para el texto
final se ha escrito erróneamente: ‘’… Napier said, adding that he would
actually challenge ‘’Pope FRANCIS’ right to choose that’’. El Cardenal
Napier me ha dicho que lo corriera afirmando precisamente lo contrario,
es decir: ‘’…no one challenges Pope FRANCIS’ right to choose that’’.
No tengo que añadir nada más''.