Kampala, UGANDA (Agencia Fides, 05/06/2021) – “Ya que acabamos de salir de las elecciones,
quiero subrayar las palabras del Santo Padre de que debemos ser testigos
de la herencia de vivir una vida de reconciliación, respeto mutuo y
justicia, que se traduce en una paz auténtica”, ha dicho el Obispo de
Masaka, Severus Jjumba, en su homilía para las celebraciones del Día de
los Mártires de Uganda, que se ha celebrado el 3 de junio en el
Santuario de Namugongo. El obispo Jjumba, que ha presidido las
celebraciones, ha instado a los cristianos a emular a los mártires de
Uganda que murieron por su fe.
En las celebraciones de este año, los obispos han unido sus voces para
denunciar el aumento de la violencia en el país. A Monseñor Jjumba se ha
sumado Su Exc. Mons. Paul Ssemogerere, obispo de Kasana-Luweero y
administrador apostólico de Kampala, que ha dicho “vivimos en una
sociedad en la que la fraternidad se está desintegrando de forma
gradual”, recordando el intento de asesinato del general Wamala, en un
atentado en el que murieron su hija y su conductor.
El 1° de junio, el general Edward Katumba Wamala, ministro de
Transportes, escapó de una emboscada en Kampala pero su hija y su
conductor murieron en el ataque.
“Le enviamos nuestras más sentidas condolencias por esta pérdida y
rezamos por su pronta recuperación, al igual que nos sentimos cercanos a
la familia del conductor y rezamos para que Dios les fortalezca en este
difícil momento”, ha dicho el obispo Ssemogerere, que ha lanzado un
llamamiento a la conversión de los criminales: “Todos hemos sido creados
a imagen de Dios. Cualquier acto de violencia contra cualquier ser
humano es un ataque directo a Dios a cuya imagen hemos sido creados”.
El obispo de Kiyinda-Mityana, Anthony Joseph Antony Zziwa, presidente de
la Conferencia Episcopal de Uganda, ha instado a todos a rezar sin
cesar por el país ante la propagación de los asesinatos y otras formas
de violencia.
En su mensaje, leído al final de la celebración eucarística en el Santuario de Namugongo, los obispos han denunciado la propagación de “los asesinatos, los conflictos por la tierra, la corrupción y la tortura”, la detención de varias personas en “lugares conocidos y desconocidos” y han pedido la liberación de los presos políticos.
“Pedimos a todos los cristianos, creyentes y personas de buena voluntad
que recen y trabajen por la paz en nuestro país”, han exhortado los
obispos, que dan gracias a Dios “que nos ha mantenido vivos durante este
difícil período debido a la pandemia del Covid-19”. “Recemos con los
mártires de Uganda para que nos ayuden a superar esta pandemia”, han
concluido.