Santa Cruz, BOLIVIA (Agencia Fides, 01/06/2021) - La desesperación por obtener oxígeno para
los pacientes con el coronavirus (Covid-19) está creciendo en las
familias bolivianas, que en las últimas horas se han visto obligadas a
hacer cola para recargar sus cilindros con la esperanza de salvar a sus
seres queridos. La situación en los departamentos de Cochabamba y Santa
Cruz es muy crítica, donde personas con lágrimas en los ojos piden ayuda
para evitar la muerte de sus familiares. Crece la preocupación tras
enterarse de que ayer lunes 31 de mayo, al menos ocho personas, según
sus familiares, perdieron la vida por falta de oxígeno al Fondo Nacional
de Salud (SNC), que sin embargo niega la escasez y que hay personas
muertas por ello.
El Arzobispo de Santa Cruz, Monseñor Sergio Gualberti, durante una rueda de prensa celebrada la mañana del sábado 29 de mayo, expresó su preocupación por el corte de oxígeno en el "Hospital Católico", y destacó que hay que hacer todo lo posible para salvar la vida de pacientes hospitalizados por Covid-19. El viernes 28 de mayo, la empresa que suministra oxígeno al Hospital Católico, a través de una carta informó que a partir del día siguiente de los 750 kilogramos de oxígeno que entregaba diariamente al Hospital Católico de Santa Cruz de la Sierra, entregaría solo 250 kilogramos.
En la rueda de prensa del sábado 29, el arzobispo de Santa Cruz,
monseñor Sergio Gualberti, y el ingeniero Víctor Valda Antelo, director
del Hospital Católico, manifestaron su disconformidad y su preocupación
por las graves consecuencias que tiene la falta de oxígeno en el
hospital. También estuvo presente en la rueda de prensa Leonardo Sevilla
Grizafis, Administrador del hospital. El director del hospital ha
enviado una carta a la compañía de oxígeno pidiendo reconsiderar la
decisión de cortar el suministro, porque hay 33 pacientes críticamente
enfermos con necesidad urgente de oxígeno.
En la nota enviada a la Agencia Fides, Mons. Sergio Gualberti informa
que personalmente pidió a la empresa proveedora de oxígeno: "¡en nombre
de Dios, salvemos vidas!". De hecho, la falta de oxígeno puede provocar
la muerte de muchos de estos hermanos. También pidió no escatimar
esfuerzos para proporcionar el oxígeno necesario para salvar vidas. Por
ello, pidió a las autoridades que controlen más estrictamente la venta
de medicamentos en el mercado negro, lo que conlleva un costo excesivo
de los medicamentos, a los que no tienen acceso las personas más pobres.
La situación es muy grave en Santa Cruz, donde incluso el hospital
secundario de esta zona, el de Yapacaní, ha ordenado cerrar la unidad de
cuidados intensivos por falta de oxígeno. En entrevista con Radio La
Razón, el viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, informó
que la tercera ola de Covid-19 incrementó en un 300% la demanda de
oxígeno médico en Cochabamba y Santa Cruz, dos de los departamentos más
afectados por la pandemia. Explicó que el país cuenta con 12 plantas de
generación de oxígeno, las cuales han aumentado su producción de un 40%
en la primera ola, en un 100% de su capacidad en esta tercera ola, para
cubrir la necesidad, aunque persiste una demanda excesiva que impide el
suministro normal.
Bolivia importa oxígeno medicinal de Paraguay, Brasil y Argentina, que
cerraron fronteras de exportación y recientemente solicitaron suministro
a Chile. "Este es, por tanto, un problema que se siente en varios
países del mundo, donde la demanda de oxígeno ha sido superada por el
contagio y por esta situación desagradable que se ha presentado porque
las empresas ya han llegado al límite de su capacidad de producción ”,
dijo Silva. Bolivia, que había resistido bien la primera ola de la
pandemia, ahora tiene 371.000 casos y casi 15.000 muertes por Covid-19.