Roma, ITALIA (Agencia Fides, 18/09/2021) - Siguiendo el ejemplo de Francisco de Asís, el
cardenal Van Thuan puso el don de su persona y de su vida,
reconociéndose como criatura de Dios, como una piedra para construir el
santo edificio de la Iglesia. Así lo ha expresado el cardenal Peter
Turkson Appiah, Prefecto del Dicasterio Vaticano para el Servicio del
Desarrollo Humano Integral, en una solemne eucaristía celebrada el 17 de
septiembre en la basílica romana de Santa María en Trastevere, con
motivo del 19º aniversario de la muerte del cardenal vietnamita, el
venerable François-Xavier Nguyên Van Thuân (1928-2002).
En la celebración han estado presentes religiosas, sacerdotes y laicos
de la comunidad vietnamita en Roma y la administradora de la causa de
canonización, Luisa Melo. Entre los concelebrantes, el padre Dinh Anh
Nhue Nguyen OFM Conv, Secretario General de la Pontificia Unión
Misionera y Director de la Agencia Fides, ha anunciado su intención de
organizar el próximo año, con motivo del 20º aniversario del nacimiento
al cielo del Cardenal Van Thuan, una semana especial de espiritualidad
sobre el tema “La santidad en el mundo contemporáneo”, para conmemorar y
profundizar el precioso legado del Cardenal.
En su homilía, el cardenal Turkson ha explicado: “Hoy recordamos su vida
y su extraordinaria experiencia de fe. Nos unimos en la oración para
encomendarlo a Dios y rezar por su beatificación. Estamos reunidos para
renovar nuestra esperanza en el Dios de la Providencia”.
Refiriéndose a la primera lectura de la liturgia (Rom 12,3-13), el
cardenal Turkson ha recordado que “cada uno de nosotros ha recibido
dones de Dios, como la fe, la profecía, la caridad. Y el cardenal Van
Thuan, siguiendo el ejemplo de Francisco de Asís - cuyo nombre llevaba-,
construyó la Iglesia con los dones que recibió de Dios. El Cardenal nos
sigue enseñando que los dones recibidos no son para nuestro propio uso:
son para la comunidad. Hoy es un guía y un punto de referencia para la
Iglesia en Vietnam”.
Durante la misa, los fieles presentes han rezado por todos los que
sufren persecución por su fe en Vietnam y en otras partes del mundo y
por la misión del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano
Integral, para que su trabajo esté siempre acompañado por la intercesión
del cardenal Van Thuan.
Los fieles vietnamitas y muchos de los que le conocieron recuerdan su extraordinaria experiencia cristiana, marcada por las vicisitudes de la cárcel y la persecución, y le describen como “una persona siempre llena de luz, de alegría, de paz interior, un hombre en el que brillaban las virtudes de la humildad, la sencillez y la caridad”.
Hoy el camino hacia la beatificación del Cardenal, declarado Venerable
por el Papa Francisco el 4 de mayo de 2017, espera el milagro para su
plena realización. El Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano
Integral, que el cardenal Van Thuan presidió en el pasado, cuando se
llamaba "Consejo Pontificio para la Justicia y la Paz", se ha
comprometido a promover el conocimiento de la vida y la espiritualidad
del cardenal vietnamita, como un regalo para la Iglesia universal.