Asunción, PARAGUAY (Agencia Fides, 05/06/2021) - La Iglesia paraguaya, a través de la Comisión
de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal (CEP), rechaza sin
consulta la reforma de la ley agraria. En el comunicado enviado a la
Agencia Fides, los obispos paraguayos advierten que una aprobación sin
consulta del Estatuto Agrario podría tener "graves consecuencias
sociales" y piden un análisis detenido de la situación, teniendo en
cuenta las declaraciones de los líderes sociales afectados. El problema
de la propiedad de la tierra se ha convertido en un tema muy crítico en
América Latina, particularmente en los países del Atlántico y en la
selva amazónica.
Mientras el 3 de junio el Senado de Paraguay deliberaba sobre la
propuesta presentada por la Cámara de Diputados, las organizaciones
campesinas se han movilizado para rechazar una reforma al Estatuto
Agrario que, a su juicio, beneficia a los grandes productores y no a los
agricultores paraguayos. Después de la sesión, que rechazó el proyecto
de ley, el texto fue enviado de regreso a la Cámara de Diputados. En los
últimos días, diversas organizaciones, entre ellas una delegación
encabezada por Monseñor Mario Melanio Medina, obispo emérito de
Misiones, habían entregado una nota a los senadores pidiéndoles que
rechacen esta propuesta, ya que la reforma al estatuto agrario pretende
legalizar gran parte tierras estatales ocupadas ilegalmente por personas
que no son precisamente campesinos, beneficiarios directos de la
Reforma Agraria.
"Un proceso abierto y amplio, con la participación de todos los sectores
y actores sociales interesados", piden los obispos de Paraguay ante la
nueva discusión del proyecto de ley en el Congreso Nacional. "Un tema de
tanta importancia debe ser discutido con la población que está sujeta a
la Reforma Agraria", reza el comunicado emitido por la Coordinación
Nacional de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal Paraguaya.
El Episcopado paraguayo recuerda que el Estatuto Agrario y sus reformas son un instrumento legal que fue "el resultado de un largo proceso que involucró la participación de los diversos sectores y actores sociales afectados por los alcances de esta ley". Por ello, no solo requiere diálogo, sino que también se propone cooperar para alcanzar consensos entre todas las personas involucradas. “La Pastoral Social de la Conferencia Episcopal - concluye la nota - en el cumplimiento de su misión de acompañar a los más pequeños y vulnerables de la sociedad, está atenta al tratamiento de esta ley y abierta a colaborar con todos los sectores interesados en la búsqueda del consentimiento que le permita la consecución del bien común ".
En Paraguay se estima que alrededor de 700.000 hectáreas de tierra están
ocupadas ilegalmente por personas que no califican para ser
beneficiarias de la Reforma Agraria. El presidente de la Unión de
Empresas Productivas (UGP), Héctor Cristaldo, cuestionó la buena
intención de cambiar el Estatuto Agrario al intentar confundir el tema
de la propiedad de las tierras públicas, y advirtió que esto es una
amenaza para el sector y que se debe tener" cuidado con los falsos
profetas".