Juba, SUDÁN DEL SUR (Agencia Fides, 11/04/2019) - La retirada del poder del presidente de Sudán,
Omar Hasan Ahmad al-Bashir, podría traer consecuencias imprevistas para
el acuerdo de paz en Sudán de Sur. Esto es lo que temen los observadores
internacionales. "El Acuerdo Revitalizado sobre la Resolución del
Conflicto en el Sur de Sudán (R-ARCSS) firmado el 12 de septiembre en
Addis Abeba por el presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, y el líder
rebelde, el ex vicepresidente Riek Machar, tenía como patrocinadores
máximos al presidente de Uganda Yoweri Museveni y al de Sudán, Bashir",
explica una fuente de la Agencia Fides (que, por razones de seguridad,
no quiere ser mencionado).
"Y fue este último quien dio el empujón final para convencer a las
partes de que lo firmaran, viniendo en persona a Juba e invitando a Kiir
y Machar a Jartum. El interés de los sudaneses es claro: el petróleo,
cuya producción gracias a los acuerdos de paz ha podido reanudarse a
partir de los pozos reparados. Los analistas de Sudán del sur se
preguntan si ahora, con el cambio de gobierno en Jartum, las nuevas
autoridades seguirán apoyando el R-ARCSS o si, por el contrario, la
caída de Bashir es el preludio de un período de confusión en Sudán. En
este caso, el nuevo gobierno sudanés daría prioridad a sus asuntos
internos al centrarse menos en su vecino del sur. En Sudán del Sur, por
lo tanto, podría desatarse una mayor inestabilidad.
En el Vaticano, en la Domus Sanctae Marthae, se está llevando a cabo un
retiro espiritual entre el 10 y el 11 de abril, con la participación de
las más altas autoridades civiles y eclesiásticas de Sudán del Sur: el
presidente Salva Kiir Mayardit, y cuatro de los cinco vicepresidentes
designados: Riek Machar Teny Dhurgon, James Wani Igga, Taban Deng Gai y
Rebecca Nyandeng De Mabior.
"La iniciativa del retiro espiritual ha tenido naturalmente un amplio
eco en el sur de Sudán", informó otra fuente de Fides. "Los comentarios
de la gente son generalmente positivos y aprecian especialmente la
disponibilidad del papa Francisco. Hay, sin embargo, cierto escepticismo
sobre la actitud de los políticos que durante años han tenido el poder
en sus manos pero no lo han utilizado para el bien de la población".
"La creación del gobierno de unidad nacional previsto en los acuerdos de
paz ratificará que la guerra ha terminado realmente", señaló la fuente. "Desafortunadamente algunos grupos no han firmado el R-ARCSS y por esta
razón no se puede decir que la guerra ha terminado completamente. En
las últimas dos semanas no ha habido noticias de enfrentamientos, pero
el conflicto sigue latente. Por otra parte, en su último documento, los
obispos de Sudán del Sur han denunciado la lentitud de la aplicación del
acuerdo de paz. La situación, sin embargo, puede
mejorar. Esperamos que la reunión en el Vaticano contribuya al
desarrollo de acontecimientos positivos para Sudán del Sur".