viernes, 21 de diciembre de 2018
En Damasco, un pesebre sin techo
Damasco, SIRIA (Agencia Fides, 21/12/2018) - Este año muchos jóvenes cristianos han
comenzado a reunirse de nuevo también en la catedral maronita de
Damasco, después de años sin llevar a cabo ninguna actividad en común a
causa de la guerra. Los jóvenes son los que esta Navidad se ocuparon de
instalar el pesebre en el templo. En esa escena de Natividad que los
muchachos y muchachas han preparado las figuras de la Virgen María, San
José y el Niño Jesús están al aire libre sin estar protegidas por un
techo o dentro del establo, como habitualmente se presentan los pesebres
en el mundo. Y si los fieles y los peregrinos preguntan por esto a los
jóvenes cristianos de Damasco, responden que la Sagrada Familia bajo las
estrellas y sin un lugar a dónde ir simboliza la situación de 13
millones de refugiados sirios que no tienen techo. "El Niño Jesús es uno
de ellos. Queríamos ser solidarios con nuestros compatriotas
refugiados, empobrecidos y olvidados, con este pesebre sin techo
abandonado, como ellos, a cielo abierto, de donde proviene la única
esperanza", explica en un mensaje enviado a la Agencia Fides el
arzobispo maronita Samir Nassar.