Después de la visita del Papa, la misión de construir armonía y convivencia entre las religiones

Abu Dhabi, EMIRATOS ÁRABES UNIDOS (Agencia Fides, 21/02/2019) – “Fue un momento de alegría conocer al Papa Francisco. Fue una gran bendición de Dios para todos los que vivimos en los Emiratos Árabes Unidos”. Son las palabras de un católico pakistaní a Fides, Nadeem Lal Bhatti, residente en los Emiratos Árabes Unidos desde hace 7 años. Nadeem formó parte del grupo de servicio litúrgico en la Catedral de San José en Abu Dhabi.

“Continúan en nuestros corazones los momentos con los fieles de distintas nacionalidades. Todos disfrutaron de un clima de celebración y amistad en esos días, incluso no cristianos. Nosotros continuaremos con nuestro compromiso de construir puentes de armonía y solidaridad”, señala. “El Papa nos ha dado a todos, a la sociedad de los Emiratos, un mensaje de paz, esperanza y fraternidad. Después de esta visita, hemos notado que el deseo de promover la tolerancia y la convivencia entre los fieles de diferentes religiones se ha fortalecido en la vida cotidiana”, asegura al recordar que los Emiratos Árabes Unidos (EAU) celebran en 2019 “El Año de la tolerancia”. “Los Emiratos Árabes Unidos son el hogar de una población de más de 200 nacionalidades de varios continentes. Y, a pesar de que el Islam es la religión oficial, son conocidos por el respeto y la libertad de culto que se otorga a todas las demás religiones”, señala.

Adonis Panen, un joven filipino y ministro extraordinario de la Comunión, que realizó el servicio litúrgico durante la misa papal, en declaraciones a la Agencia Fides, indica: “La visita del Papa a este país ha dejado un legado de alegría, entre católicos y no católicos. El clima de felicidad que se respiró entre las personas que participaron en la misa papal fortaleció la unidad, la paz y la armonía en los Emiratos Árabes Unidos. Todavía estamos viviendo esa sensación”.

Por su parte, Francis John, ciudadano indio residente en los Emiratos Árabes Unidos desde hace veinte años, y que fue voluntario durante la visita, relata a Fides: “Hemos trabajado arduamente durante dos meses para preparar todos los aspectos logísticos y organizativos del viaje. El sueño de todo bautizado es participar en una misa con el Papa. Para nosotros que trabajamos en los Emiratos Árabes Unidos, fue una bendición especial: Dios nos ha brindado esta oportunidad que quedará para siempre en nuestra experiencia humana y espiritual”.