Lahore, PAKISTÁN (Agencia Fides, 27/02/2019) - Decir "no" a la guerra, llevar un mensaje de
paz, pedir a los gobiernos de India y Pakistán que no involucren a los
dos pueblos en un conflicto que sólo traería odio, dolor y destrucción.
Con este espíritu, en una fase de alta tensión entre India y Pakistán,
después del ataque en Cachemira y la reacción militar india, el 26 de
febrero una delegación de frailes franciscanos capuchinos peregrinó a
Gandha Singh, pueblo de Punjab, en la frontera entre India y Pakistán.
Benedicto Ayodi OFM Cap, presidente de la Comisión de Justicia, Paz e
Integridad de la Creación de la Curia General de la Orden de los Frailes
Capuchinos, llegó a Pakistán para seguir proyectos e iniciativas sobre
temas como la gestión de conflictos, los derechos humanos, la reducción
de la pobreza, la construcción de la paz y el diálogo interreligioso.
Francis Nadeem OFM Cap, custodio de los Capuchinos de Pakistán y
Secretario Ejecutivo de la Comisión Episcopal para el Ecumenismo y el
Diálogo Interreligioso, conocido promotor de la paz y la armonía
interreligiosa en el país, dijo a la Agencia Fides: "El propósito de
esta visita era enviar un mensaje de paz, hermandad, amistad,
reconciliación y aceptación mutua a las naciones de la India y Pakistán.
Hemos elevado a Dios una oración para comprometernos por una paz
duradera, hemos guardado silencio y hemos encendido velas para
simbolizar nuestro compromiso y nuestra invocación al Altísimo". Los
frailes rezaron y distribuyeron a la gente presente en el pueblo la
oración atribuida a San Francisco de Asís, que recita "Dios haznos
instrumentos de tu paz". Los franciscanos en Pakistán, dijeron, en este
momento crítico de una posible escalada militar, "sienten una clara
responsabilidad de no ceder a la violencia y de proponer una solución
pacífica a la antigua cuestión de Cachemira, instando a la política, en
Pakistán y en la India, a elegir el camino de la negociación y la
confrontación y no el de las armas".