martes, 2 de abril de 2019

2020 será “el año de los jóvenes” para la Iglesia católica de Pakistán

Islamabad, PAKISTÁN (Agencia Fides, 01/04/2019) - “2020 será el año de la juventud”. Así lo asegura a Fides el arzobispo de Islamabad Joseph Arshad, presidente también de la Conferencia Episcopal de Pakistán. La Iglesia en Pakistán, respondiendo a las indicaciones y desafíos lanzados durante el Sínodo de los jóvenes, cree que las nuevas generaciones “pueden promover el Evangelio de la paz a través de la amistad y la comunión entre los jóvenes que pertenecen a varias religiones, grupos étnicos y culturas”. Los jóvenes son “ciudadanos activos llamados a trabajar por la promoción de la unidad y la armonía. Son responsables del cambio en la sociedad y pueden desempeñar un papel vital en la nación”. A partir de estas consideraciones, los obispos pakistaníes creen que “el factor clave para la vida de los jóvenes es la educación”, a la que todos deben tener acceso, especialmente los que provienen de comunidades religiosas minoritarias. La educación es esencial “para llevar la paz a la sociedad y luchar contra la injusticia y la corrupción”.

El Año de los Jóvenes, que involucrará a todas las comunidades locales, pretende “difundir los valores evangélicos de amor, esperanza, unidad, paz y respeto mutuo para que los jóvenes puedan cultivar fácilmente la unidad, la paz y la armonía en nuestra sociedad, ofreciendo un ejemplo de convivencia entre personas de diferentes credos”.

En este marco, Cáritas Pakistán, junto con otras asociaciones como Jesus Youth Paksitan, lanzó el proyecto Juventud por la paz, enviando a los jóvenes a ser auténticos constructores de paz.

El mensaje, partiendo de los jóvenes cristianos, tiene como objetivo llegar a los jóvenes musulmanes, hindúes y sikhs: “Somos el futuro del país, queremos construir un mañana hecho de paz, justicia, tolerancia, respeto por la dignidad inalienable de todos los seres humanos, sin distinción de raza, religión, clase social”.

Como lo explicó la Comisión Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal, “trabajamos para crear la conciencia de que la armonía y la paz son un bien común y una prioridad para toda la nación. Es esencial comenzar este trabajo de sensibilización en las escuelas. La intolerancia y el odio surgen muchas veces en los pupitres. El futuro de Pakistán depende de cómo los valores de la paz y de la justicia permean la formación de las nuevas generaciones”.