jueves, 21 de febrero de 2019

Crisis en la Universidad de Belén. Las negociaciones con los alumnos continúan

Belén, PALESTINA (Agencia Fides, 20/02/2019) – Todavía no se han superado los problemas que podrían hacer peligrar el semestre académico en la Universidad de Belén. El centro, dirigido por los Hermanos de las escuelas cristianas y impulsado en los años 70 en parte por iniciativa del Papa Pablo VI como una herramienta de formación para jóvenes palestinos en la ciudad donde nació Jesús, vive una época difícil marcada por un enfrentamiento entre las autoridades administrativas y los representantes de los estudiantes, por los costes de gestión y el aumento de la contribución económica solicitada a los estudiantes. En declaraciones a Fides, Michel Sansur, Vicepresidente Ejecutivo de la Universidad, a la Agencia Fides, indicó que “estamos tratando con representantes de los estudiantes para encontrar una solución a los problemas y convencer a todos para que regresen a las clases y reanuden las clases. Si esto no sucede, el Ministerio de Educación de Palestina ha anunciado que cancelará el semestre de nuestra Universidad, dado que no se ha llevado a cabo el número mínimo de horas requeridas para reconocer la validez académica de los cursos”.

La crisis de la Universidad de Belén se ha precipitado en las últimas semanas. El 6 de febrero, el hermano Peter Bray, vicerrector de la Universidad, anunció la suspensión indefinida de los cursos universitarios en el semestre que comenzó el 18 de enero pasado, debido a las repetidas interrupciones de las lecciones. Los representantes de los estudiantes han considerado hasta ahora no concluyentes las negociaciones que se iniciaron con la Administración de la Universidad para hablar sobre “el aumento de las tarifas para la formación de estudiantes de las facultades de Enfermería y Ciencias de la Educación”, y restaurar las formas de pago de las tarifas requeridas a los estudiantes.

El aumento de las tarifas entró en vigor en 2016. La Universidad de Belén financia más de la mitad del coste de los cursos con dinero de fuentes externas. En una carta recientemente publicada por las autoridades universitarias recordaron además que la Universidad Católica “debería recibir 1.3 millones de dólares cada año de la Autoridad Palestina, pero esto no está sucediendo”.

Sobre la difícil situación creada en la Universidad de Belén pesan además el aumento de los costes de las actividades de formación fuera de la Universidad, -como las que se realizan en los centros de salud palestinos-, y, por lo tanto, también indirectamente, los recortes de fondos y para ayudar a la Autoridad Palestina y a los palestinos decretados por la actual Administración de los Estados Unidos.

En enero de 2018, informaron las fuentes oficiales del Patriarcado Latino de Jerusalén, Estados Unidos congeló 65 millones de dólares en un paquete de ayuda de 125 millones de dólares a la agencia de la ONU para la ayuda y el desarrollo de los refugiados palestinos (UNRWA) y el 25 de agosto recortaron 200 millones de dólares de ayuda a la Autoridad Palestina destinada al gobierno, la sanidad, la educación y la financiación para la sociedad civil.