Nairobi, KENIA (Agencia Fides 05/11/2021) – “Esperamos un mundo transformado, en el que la
humanidad en toda su diversidad desarrolle una reverencia compartida
por la vida en el planeta Tierra. Juntos, estamos construyendo
comunidades y economías resistentes y solidarias que satisfacen las
necesidades de todos y protegen la Creación”, así lo afirman los líderes
religiosos africanos que han firmado la petición sobre el cambio
climático, en referencia a la actual Cop26 que se está celebrando en
Glasgow. “La era de la conquista, la extracción y la explotación ha
dejado paso a la cooperación y la comunidad”, añaden.
Según la información recibida en la Agencia Fides, los líderes
religiosos africanos insisten en “no perpetuar un sistema económico
obsoleto basado en los combustibles fósiles y en la destrucción de los
mismos bosques, aguas, océanos y suelos que son fundamentales para la
humanidad”. Destacan que hay que promover las energías renovables, el
acceso universal al agua y el aire limpios, precios asequibles para la
energía limpia y alimentos cultivados con respeto a la tierra, así como
la creación de puestos de trabajo en condiciones seguras”.
Los líderes religiosos también advierten contra las industrias
extractivas que “destruyen inmoralmente los bosques tropicales, su
incomparable biodiversidad y sus guardianes indígenas”. También piden a
los gobiernos que promulguen y apliquen leyes que protejan a las
personas y al planeta por igual, en armonía con la dignidad inherente a
cada ser humano y la biodiversidad del mundo. “Los países más ricos
deben comprometerse a lograr cero emisiones netas de gases de efecto
invernadero para 2030 y acelerar las transferencias financieras y
tecnológicas a los países más pobres para garantizar una transición
mundial justa hacia el cero antes de 2050”.
En su mensaje, las organizaciones religiosas prometen ser “modelos de
liderazgo medioambiental, promoviendo la educación religiosa, las
estructuras y las voces públicas de los líderes espirituales, los
miembros y los seguidores, para animar a los círculos locales de
atención y resiliencia de las comunidades a participar en la
transformación a través de la educación, la organización, la defensa y
la formación profesional”.
“Cada persona es portadora de una chispa divina, de dones únicos y de la responsabilidad moral de hacer de su vida una bendición para la Tierra y todos los pueblos”, concluyeron dirigiéndose a cada individuo.
La petición apoya el llamamiento del Papa Francisco a una acción urgente
y lleva las firmas de más de 120.000 católicos y más de 425
organizaciones asociadas, que representan colectivamente a cientos de
miles de católicos de los seis continentes. Entre otros, el obispo
Joseph Obanyi, de la diócesis de Kakamega (Kenia), el secretario general
del Consejo de Iglesias de Zambia, que incluye a la Conferencia de
Obispos Católicos de Zambia (ZCCB), el padre Emmanuel Chikoya, y
miembros del Consejo Interreligioso de Uganda (IRCU).