Bangkok, TAILANDIA (Agencia Fides, 21/12/2021) – “Para mostrar el amor de Dios, prestan tantos
servicios sociales loables en muchas partes del país, especialmente en
las periferias de la sociedad”, ha dicho Kriengkrai Boonyasith, Director
General del Departamento de Asuntos Religiosos, en el Ministerio de
Cultura del Gobierno de Tailandia, al reunirse ayer, 20 de diciembre,
con una delegación de las cinco principales confesiones cristianas, en
vista de la próxima Navidad. Al encuentro han participado representantes
de la Iglesia católica, de la Iglesia protestante, de la comunidad
evangélica, de la Iglesia baptista y de la Iglesia adventista del
séptimo día.
Según Kriengkrai, la Navidad tiene un profundo significado para la vida
de todo hombre: “Jesucristo nació como un regalo de Dios a la humanidad.
Su vida y sus enseñanzas son tan hermosas. Él ama a las personas y las
redime del pecado al morir en la cruz”, ha añadido.
El Director ha dado las gracias a la delegación cristiana por su
servicio en los ámbitos de la educación, la salud y el desarrollo
social. También ha expresado su profundo agradecimiento por la labor
caritativa realizada por los cristianos hacia los necesitados y
vulnerables, especialmente durante la pandemia, cuando ayudaron a
proporcionar alimentos y otros artículos de primera necesidad a los
indigentes.
Durante la reunión, la hermana Kannikar Lamthaisong ha ofrecido un
regalo de Navidad a Kriengkrai como señal de buena voluntad. “Como
miembros de una delegación de las cinco confesiones cristianas, nos
reunimos con Kriengkrai y le informamos sobre las obras que los
cristianos realizan en el país”, ha declarado la religiosa a la Agencia
Fides. “El Director ha elogiado nuestras obras en favor del prójimo,
especialmente de las personas marginadas de la sociedad”, ha confirmado.
En un país de mayoría budista, la Constitución tailandesa garantiza la libertad religiosa para todos. A nivel gubernamental, el Departamento de Asuntos Religiosos se ocupa de los asuntos y las relaciones con las comunidades religiosas para preservar, promover, apoyar y proteger a las comunidades confesionales, armonizando su vida con las leyes vigentes. El Departamento pretende “fomentar las buenas relaciones, los valores, la aceptación y la unidad entre personas de todas las religiones”.
La misión católica en Tailandia comenzó hace 350 años en una nación
predominantemente budista. De los 69,5 millones de habitantes, casi el
95% son budistas. Los católicos representan menos del 1% de la
población.