Concepción, BOLIIVIA (Agencia Fides, 10/12/2021) – “Al celebrar los 70 años de creación de
nuestro Vicariato de Ñuflo de Chávez, hacemos memoria de los
acontecimientos importantes que han sucedido, y de las personas de
nuestro pueblo, de los cuales muchos de nosotros conocimos. Como no
recordar el pueblo de pocos habitantes en donde los grupos organizados
por el párroco de ese tiempo nos invitaba a arreglar las calles, la
plaza, el cementerio y a trabajar en la construcción Centro Parroquial
en donde pudiera reunirse la niñez, la juventud y los mayores.
Luego la restauración de nuestra iglesia Catedral de la cual estamos
orgullosos… El Buen Dios ha sido buenos con nosotros y con nuestro
pueblo, por eso a nosotros nos toca hacer y continuar para que la
semilla del bien siga fructificando, para el bien de todos los
habitantes de nuestro pueblo”. Así lo ha dicho Mons. Aurelio Pesoa
Ribera, OFM, vicario apostólico de El Beni, presidente de la Conferencia
Episcopal boliviana, en la homilia de la Misa celebrada el 8 de
diciembre, solemnidad de la Inmaculada Concepción de Maria, Patrona del
Vicariato Apostólico de Ñuflo de Chávez, durante la cual se ha celebrado
el 70° aniversario de la fundación del Vicariato, con el lema: “Iglesia
Comunión, Participación y Misión”.
Con Mons. Pesoa Ribera hanno concelebrado la Eucaristía, Mons. Roberto
Flock, obispo de la diócesis de San Ignacio de Velazco, y Mons. Antonio
Bonifacio Reimann Panic OFM, obispo del Vicariato Apostólico de Ñuflo de
Chávez, además de los sacerdotes que trabajan en las diferentes
parroquias. La celebración ha contado con la presencia y participación
de religiosas, seminaristas diocesanos y franciscanos, y las autoridades
civiles del municipio de Concepción.
La homilía se ha centrada sobre las lecturas bíblicas de la Solemnidad
de la Inmaculada: “Hoy contemplamos en la Palabra de Dios, lo peor del
ser humano, el pecado y lo mejor del ser humano, la respuesta de la
Virgen María” ha subrayado Mons. Pesoa Ribera, que ha continuado:
“Lamentamos que cada uno experimenta en el país las consecuencias del
espíritu del mal que se visibilizan en la capacidad para mentirnos unos a
otros, para corrompernos, si nos ofrecen alguna ventaja. Vemos como
aumentan las divisiones y el odio entre hermanos, a veces fomentado por
aquellos que tienen la misión de ayudarnos a caminar unidos. Vemos la
capacidad de mentir sobre los hechos que suceden en nuestra historia, la
instrumentalización del poder para el bien de unos pocos”.
“Realmente necesitamos encuentro, reconciliación, perdón y dialogo entre hermanos, entre bolivianos y en cada pueblo y en cada una de nuestras familias, pero qué difícil se nos hace cuando el odio, fruto de nuestra situación de pecado, se mete en los corazones, en nuestras casas y en nuestras instituciones” ha continuado el obispos que ha invitado a pedir la intercesión de Maria, para que “siga inspirando en Bolivia ejemplos de amor, para que construyamos un país sin discriminaciones. Un país entre todos y para todos. Un país sin exclusiones… En Bolivia también debemos querernos, porque somos todos hijos de la misma Madre, María y del mismo Padre, Dios”.
El Vicariato Apostólico de Ñuflo de Chávez, una de las provincias del
Departamento de Santa Cruz, fue erigido el 13 de diciembre de 1951. La
labor de evangelización de este territorio fue iniciada por los jesuitas
en 1691, y desde 1823 la llevan a cabo los Franciscanos Menores (OFM).
Tiene una población de 197.189 habitantes, de los cuales 161.076 son
católicos. Hay 18 parroquias, 19 sacerdotes diocesanos, 5 religiosas y 3
seminaristas.