Kolowarè, TOGO (Agencia Fides 03/11/2021) – “Todos teníamos necesidad de estar juntos, de
sentirnos iglesia, vivos, más allá de los confines y de los cierres de
nuestras iglesias. Y así, el 31 de octubre, nos reunimos todos en la
iglesia, las cinco comunidades de base, con el resto de la comunidad,
para concluir, juntos, en una apoteosis final el mes del Rosario" (véase
Agencia Fides 4/10/2021) escribe a la Agencia Fides el P. Silvano
Galli, sacerdote de la Sociedad de Misiones Africanas (SMA) en Kolowarè.
“Necesitábamos esta celebración comunitaria, esta explosión de vida,
celebrar todos juntos, estos momentos para decir, para gritar nuestra
fe. Ningún cierre de iglesia puede detener la fe del Pueblo de Dios”,
dice el misionero con convicción. “Al día siguiente, con motivo de la
Fiesta de los Santos- prosigue el P. Galli -, fuimos a rezar a nuestros
dos cementerios. La ceremonia en honor y recuerdo de nuestros difuntos
comienza en la iglesia, al final de la misa. Normalmente, toda la
comunidad visita y reza en los dos cementerios. Este año, el párroco nos
propuso acompañar a un grupo al antiguo cementerio situado detrás de
nuestra misión, y a un segundo grupo al nuevo, donde están enterrados la
mayoría de los difuntos. Con el párroco, acompañé a los fieles al
primer cementerio.
Tras la oración por los difuntos, los fieles encendieron una vela y la colocaron junto a las tumbas, y el sacerdote pasó a bendecir las tumbas diseminadas entre los árboles. Mientras rezábamos en este cementerio, otra parte de los fieles se reunía en el nuevo cementerio diseminado en medio del bosque, donde están enterrados la mayoría de nuestros muertos”.
“La animación de este acontecimiento fue tan original que creo que todos
los espíritus del bosque de al lado miraban atónitos a la iglesia para
intentar comprender lo que estaba pasando. Y nuestros antepasados
reposaban en sus tumbas con una sonrisa”, concluye el misionero.