jueves, 27 de mayo de 2021

El Arzobispo Boutros Marayati nombrado Administrador Patriarcal de la Iglesia Católica Armenia

Alepo, SIRIA (Agencia Fides, 27/05/2021) – El arzobispo armenio católico Boutros Marayati, jefe de la comunidad armenia católica de Alepo, ha sido nombrado administrador apostólico interino de la Iglesia armenia católica, tras el fallecimiento del patriarca armenio católico por enfermedad Krikor Bedros Ghabroyan. La noticia del nombramiento ha sido dada a conocer en la tarde del miércoles 26 de mayo por la Secretaría del Patriarcado Católico Armenio. El nombramiento se ha realizado sobre la base del artículo 127 del Código de Cánones de las Iglesias Católicas Orientales, que establece que durante la vacante de la Sede Patriarcal el cargo de Administrador de la Iglesia Patriarcal es asumido por “el obispo más antiguo por ordenación entre los obispos de la Curia Patriarcal o, si no hay ninguno, entre los obispos miembros del Sínodo permanente”. La principal tarea del Administrador Patriarcal interino será convocar a los miembros del Sínodo de la Iglesia Católica Armenia para elegir al nuevo Patriarca.


Boutros Marayati, nacido en Alepo en febrero de 1948, fue ordenado sacerdote en 1971 y en 1990 fue consagrado obispo católico armenio de su ciudad natal. Durante los largos años del conflicto sirio, permaneció al lado de las menguantes comunidades cristianas de Alepo, una ciudad martirizada que durante mucho tiempo fue un campo de batalla entre las fuerzas militares leales al presidente Bashar al Assad y las milicias rebeldes, incluidas las de tendencia yihadista.
 

En enero de 2014, en calidad de Administrador Apostólico sede vacante et ad nutum Sanctae Sedis de la eparquía armenia católica de Kamichlié (Qamishli), el arzobispo Marayati desautorizó la iniciativa “Adopta una parroquia en Siria” lanzada en línea por un sacerdote armenio católico sirio como proyecto para recaudar fondos para las comunidades cristianas que sufren en Siria. En esa ocasión, el arzobispo Marayati anunció, a través de la Agencia Fides, que el sacerdote que promovió la iniciativa no tenía “ninguna autoridad ni autorización para organizar colectas en nombre y a favor de parroquias o escuelas cristianas en Siria”.