jueves, 27 de mayo de 2021

Obispos de Perú: “La Iglesia siempre ha estado y estará al servicio del país, como lo viene demostrando en este duro tiempo de la pandemia”

Lima, PERÚ (Agencia Fides 26/05/2021) – Siguiendo la costumbre, la Conferencia Episcopal Peruana (CEP) ha invitado a un “encuentro fraterno” a los dos candidatos en la segunda vuelta para la Presidencia de la República, prevista para el próximo 6 de junio. El lunes 24 de mayo, en la sede del CEP, se celebró la reunión con Keiko Fujimori, de Fuerza Popular, mientras el Episcopado espera una respuesta del otro candidato, Pedro Castillo, de Perú Libre, según informa la nota enviada a la Agencia Fides. 


En el contexto de la Solemnidad de Pentecostés y ante la proximidad de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, los obispos del Perú, han enviado una “Carta al Pueblo de Dios” titulada “Una buena política está al servicio de la Paz” en la que proponen algunas reflexiones para “acompañarles en los difíciles momentos” que está viviendo el país.


Dividida en 12 puntos, la carta lleva la fecha del 25 de mayo y recuerda en primer lugar que “es un deber ciudadano ir a votar y emitir un voto responsable, pensando en el presente y en el futuro del país”. Por ello, los obispos invocan de Dios el don de la Sabiduría, para poder discernir y elegir al mejor candidato para la nación, “para encaminarnos a superar la crisis social, política, económica, educativa, sanitaria y la corrupción que nos afecta y golpea a todos de manera especial a los más débiles y vulnerables”.


La Iglesia invita a “votar de forma libre y bien informada”. En el contexto del bicentenario de la independencia nacional, “estas elecciones deben ser una ocasión para fortalecer los valores fundamentales de la Nación: democracia, libertad, Estado de derecho, independencia de poderes, dignidad humana, la vida, la familia, la propiedad, el respeto de los tratados internacionales”. Además, a través de estas elecciones “debemos también reafirmar los grandes valores éticos, morales y religiosos que sustentan a nuestra nación desde sus inicios y que constituyen la gran reserva moral del país”.


En la carta se recuerda después que la Iglesia, en fidelidad a la dignidad humana, siempre ha rechazado y condenado al comunismo por ser un sistema perverso que reduce al ser humano a la esfera de lo económico y restringe las libertades fundamentales de la persona, así como también el capitalismo salvaje que reduce al ser humano al “consumismo”, además “condena al terrorismo, la violencia venga de donde venga y a todo atentado contra la vida”. La Iglesia tiene como fuente de sus enseñanzas el Evangelio y lo anuncia en comunión con el Magisterio Pontificio y el Magisterio de la Iglesia en América Latina y el Caribe, “que se sustenta en los principios de la dignidad humana, el bien común, la opción preferencial por los pobres, promoviendo una sociedad fraterna, solidaria, y una economía inclusiva”.


Reiterando que “la Iglesia fiel al Evangelio de Jesucristo, siempre ha estado y estará al servicio del país, como lo viene demostrando en este duro tiempo de la pandemia”, los obispos subrayan que “La buena política debe también atender las urgentes necesidades, sobre todo de los más pobres y vulnerables y debe ser capaz de unirnos, no de dividirnos”.


Por último el texto pone de manifiesto que “para fortalecer la democracia, es necesaria una ciudadanía activa, proactiva y vigilante que esté muy atenta para preservar el orden democrático ante cualquier intento de quebrantarlo” y que es necesario “recuperar la confianza entre nosotros para que juntos y con generosidad construyamos un Perú realmente fraterno, solidario, en paz”.