jueves, 20 de mayo de 2021

Un nuevo derrame de petróleo causa daños a las comunidades y al medio ambiente: los pueblos indígenas no son escuchados

Loreto, PERÚ (Agencia Fides 20/05/2021) - Se ha registrado un nuevo vertido de petróleo en el río Corrientes, cerca del distrito de Trompeteros, en la provincia de Loreto, en la Amazonia peruana. La fuga se originó en la instalación operada por PlusPetrol Norte. "Desde el 10 de mayo, el petróleo está en el río, por eso pedimos ayuda", dijo el reportero Edson Hualinga de la emisora "La Voz de la Selva". Hualinga agregó que el evento ocurriría en la madrugada y afectaría a unas 16 comunidades de la zona, entre ellas San Cristóbal, Unión y Palmeras.
El subprefecto de Villa Trompeteros, Robert Torres, que fue informado del incidente, dijo que se pondría en contacto con las autoridades gubernamentales para que no se eludan las responsabilidades de este caso. Sin embargo, las causas siguen siendo desconocidas. Tedy García, líder de la etnia achuar de Trompeteros, expresó su indignación por los continuos derrames que se producen en la zona porque, a pesar de las pruebas que presentan al Estado, no son escuchados. Tras la denuncia, el ministro del Ambiente, Gabriel Quijandría, informó a través de Twitter que un equipo del Organismo de Evaluación y Fiscalización del Ambiente (OEFA) se trasladó a Iquitos, rumbo a la zona afectada para evaluar la situación. Según fuentes de Fides, estos casos no aparecen en la prensa.
 

A finales de abril, se produjo otro vertido en Trompeteros, esta vez afectando a la comunidad de Nueva Esperanza. A pesar de las protestas de la población, Pluspetrol les informó de que no aceptaba la responsabilidad de los daños causados. Según información del OEFA (Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental), desde el año 2000 se han producido más de 180 derrames de petróleo en el bloque 8, que opera PlusPetrol. Actualmente, la empresa minera se encuentra en proceso de liquidación para evitar hacerse cargo de 1199 emplazamientos dañados sólo en el bloque 192. Además, según un informe elaborado en colaboración entre la Comisión Nacional de Derechos Humanos y Oxfam (Comité de Oxford para el Alivio de la Hambruna), la empresa minera es responsable de los daños causados en 2.000 lugares.
 

La noticia enviada a la Agencia Fides por el Observatorio Socioeclesial pone de manifiesto la situación de impotencia de las poblaciones indígenas frente a estas empresas petroleras internacionales que no se responsabilizan de los daños causados a las comunidades y al medio ambiente, hábitat fundamental para estas poblaciones.
 

Son muy oportunas las palabras del Papa Francisco pronunciadas precisamente en Perú, el 19 de enero de 2018: "Probablemente los pueblos originarios de la Amazonía nunca han estado tan amenazados en sus territorios como ahora. La Amazonia es una tierra disputada en varios frentes: por un lado, el neoextractivismo y la fuerte presión de los grandes intereses económicos que dirigen su codicia sobre el petróleo, el gas, la madera, el oro, los monocultivos agroindustriales; por otro lado, la amenaza contra sus territorios también proviene de la perversión de ciertas políticas que promueven la "conservación" de la naturaleza sin tener en cuenta al ser humano y, concretamente, a ustedes, hermanos amazónicos que la habitan".