Alajuela, COSTA RICA (Agencia Fides, 10/11/2021) – “La Iglesia, experta en humanidad, camina
cercana a todo lo que incumbe a las personas haciéndose solidaria y
anunciándoles la plenitud a la que están llamadas en Cristo. Se hace
presente, así, en el campo de la educación, privilegiado para el
crecimiento y bienestar personal y familiar, para la buena marcha de
nuestra sociedad, para la generación de cultura amigable con la
humanidad y la casa común. Desarrolla una acción de pastoral educativa, a
través de las personas educadoras que sirven a niños, jóvenes y
adultos, que viven su fe y evangelizan en el ámbito educativo, de las
familias y de las comunidades educativas que comparten esa excelsa
misión de educar”. Estas son las palabras de Su Exc. Mons. Bartolomé
Buigues Oller, obispo de la diócesis de Alajuela, en el mensaje que ha
publicado con motivo del mes de noviembre, que la Iglesia de Costa Rica
dedica “a considerar, agradecer, orar, por las personas educadoras, por
la dinámica
educativa en general”.
El lema adoptado este año es: «La persona educadora, comprometida con
una cultura solidaria». “Hemos celebrado el bicentenario de nuestra
nación y, con ello, el reconocimiento de una cultura común solidaria que
hemos generado en todo este tiempo – escribe el obispo en el mensaje
recibido en la Agencia Fides -. Entre los valores fundamentales que nos
han forjado como país está la fe cristiana, que ha impregnado
profundamente nuestra cultura en todas sus manifestaciones: actitudes,
costumbres, arquitectura, arte…”
La pandemia ha originado una larga interrupción de la tarea educativa
afectando a la calidad de la educación, aumentando la deserción escolar y
las brechas entre sectores geográficos y de clases sociales, la brecha
digital, aumentando con ello la iniquidad; el deterioro en la
infraestructura en varios centros escolares; el cansancio en los
docentes por la recarga de trabajo, la dificultad de actualizarse en los
medios digitales, la ideologización de la educación… “Tomamos esto como
reto para nuestra respuesta generosa” insta el obispo, recordando con
esperanza el llamamiento del Papa Francisco a un Pacto Mundial por la
Educación "para reavivar el compromiso por y con las jóvenes
generaciones, renovando la pasión por una educación más abierta e
inclusiva, capaz de la escucha paciente, del diálogo constructivo y de
la mutua comprensión”. Mons. Bartolomé Buigues Oller invita por tanto a
“unir los esfuerzos por una alianza educativa”, a “reconstruir el
tejido de las relaciones por una humanidad más fraterna”, y por último
recuerda la alegoría propuesta por el profeta Jeremías sobre Dios como
alfarero, que “sabe concebir y sacar del barro informe una hermosa
vasija”, “Algo así es la educación, esa es la tarea de las personas
educadoras, de cada familia y comunidad empeñada en la educación”.