lunes, 18 de febrero de 2019

Patriarcas en la cumbre de Munich: Occidente es responsable conjunto de los conflictos en Oriente Medio

Munich, ALEMANIA (Agencia Fides, 18/02/2019) - La 55ª Conferencia Internacional No Gubernamental sobre Seguridad, celebrada en Munich del 15 al 17 de febrero, también acogió a una representación de las Iglesias de Oriente Medio. Estuvieron presentes el patriarca caldeo Louis Raphael Sako, junto con Mor Ignatios Aphrem II, Patriarca sirio ortodoxo de Antioquía que, con su participación en la cumbre, tuvieron la oportunidad de participar en reuniones bilaterales con representantes políticos de diferentes países. Ambos intervinieron explicando la condición de las comunidades religiosas en Oriente Medio en este encuentro organizado por la Fundación Hanns Seidel.

El patriarca Sako, en su discurso, recordó las causas que contribuyeron en el siglo pasado a hacer que la situación de las comunidades cristianas autóctonas de Oriente Medio sea cada vez más precaria. El Primado de la Iglesia caldea, creado cardenal por el Papa Francisco, recordó que desde el colapso del Imperio Otomano las potencias occidentales ocupantes no han mostrado ninguna intención de favorecer la creación de Estados de Derecho en Oriente Medio, donde se garantice a todos los ciudadanos igualdad de derechos. El patriarca se refirió al conflicto palestino-israelí como un factor histórico que ha contribuido a fomentar el Islam político y los prejuicios que etiquetan a los cristianos de Oriente Medio como “aliados” de políticas y poderes occidentales en Oriente Medio.

Refiriéndose a la situación específica de Irak, el patriarca Sako repitió que los iraquíes han experimentado un verdadero caos desde la caída del régimen de Saddam Hussein (2003), que ha producido una situación de vacío político-institucional donde ha proliferado el sectarismo, la corrupción y la multiplicación de milicias y grupos armados fuera del control de la autoridad estatal. “La inestabilidad en Oriente Medio”, remarcó el patriarca caldeo, “ha contribuido a acentuar el dilema de los cristianos debido a la “política occidental” que fomenta el conflicto en esta región en lugar de promover la democracia y la libertad. En otras palabras, agregó el Patriarca, “quienes toman las decisiones en Occidente han hecho todo lo posible para buscar sus propios intereses por encima de los de nuestros países. Por ejemplo, controlar el petróleo y otros recursos naturales, así como vender armas para ambos lados del conflicto”. Con respecto a la recuperación de la Llanura del Nínive y el desesperado regreso de las poblaciones cristianas que huyeron durante la ocupación del Estado Islámico (Daesh), el primado de la Iglesia caldea comentó que el gobierno iraquí no ha hecho aún nada para ayudar a los desplazados internos a regresar a sus hogares, en parte debido a prácticas corruptas, ya que algunos están pidiendo dinero a estas familias desplazadas para regresar a sus hogares.

“Hemos sufrido suficiente”, dijo el patriarca caldeo, subrayando que de la crisis actual los países del Oriente Medio solo pueden salir si reconocen la igualdad de derechos para todos los ciudadanos, si los programas escolares se vacían de cualquier incitación a la discriminación, y si se trabaja para eliminar “la ideología de la Jihad o la Guerra Santa”.

El cardenal Sako también espera que la reciente visita del Papa Francisco a los Emiratos Árabes Unidos y la publicación del documento sobre la Fraternidad humana firmado por junto al Gran Imán de al Azhar puedan contribuir a la desaparición de las causas del fanatismo religioso.

El patriarca ortodoxo sirio Mor Ignatios Aphrem II, en su discurso sobre la situación en Siria, recordó a los dos arzobispos de Alepo: el ortodoxo griego Boulos Yazigi y el ortodoxo sirio Mar Gregorios Yohanna Ibrahim, quienes desaparecieron durante el conflicto en abril de 2013, y se quejó de la ausencia de representantes del gobierno sirio entre los invitados a la cumbre de seguridad. El Primado de la Iglesia Ortodoxa Siria destacó que en la fase actual, el sufrimiento de la población siria, que se enfrenta a un país devastado por el conflicto, se ve agravado por la política de sanciones internacionales impuestas por algunos países contra Siria.

En el encuentro participaron, entre otros, la canciller alemana, Angela Merkel (muy aplaudida, al final de su discurso por la audiencia de unos 450 participantes), el vicepresidente de los Estados Unidos, Mike Pence, y el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergej Lavrov.