São Paulo, BRASIL (Agencia Fides, 20/08/2021) - Actualmente en Brasil hay 162 obispos
eméritos vivos, según datos recogidos por el profesor Fernando Altemeyer
Junior, del Departamento de Ciencias Religiosas de la Pontificia
Universidad Católica de São Paulo (PUC-SP), que ha realizado un estudio
durante más de 20 años para actualizar las estadísticas y datos del
Episcopado brasileño. El Código de Derecho Canónico define como
“emérito” al obispo que pierde “su cargo por límite de edad o renuncia
aceptada”. La Iglesia fija la edad de 75 años para presentar la
solicitud de renuncia al Papa, que puede aceptarla de inmediato o
posponerla según las necesidades pastorales.
Los obispos eméritos, aunque ya no tienen que ejercer sus funciones de
gobierno de las diócesis, siguen participando en las actividades
pastorales y colaborando con la misión evangelizadora de la Iglesia. Un
ejemplo de esta colaboración es el que ofrece monseñor Francisco Biasin,
obispo emérito de Barra do Piraí, Volta Redonda, quien asumió la
presidencia de la Comisión Episcopal de Obispos Eméritos de la
Conferencia Episcopal Brasileña, CNBB, en 2019. Asegura que el emérito
es “un regalo para la Iglesia, porque ser emérito es una oportunidad
para reinventar la vida, es una nueva forma de ser obispo”.
La Comisión Episcopal de Obispos Eméritos tiene un carácter particular,
diferente a las demás Comisiones Episcopales, de acuerdo a lo que
establece el Código de Derecho Canónico, según el cual la Conferencia
Episcopal “debe tratar de brindar un apoyo adecuado y digno al obispo
que renuncia, teniendo en cuenta la obligación primordial a la que está
sujeta la diócesis a la que ha servido”. Creada en 2012 por la CNBB, la
Comisión acompaña a los obispos eméritos, cuidando de ellos, apoyándolos
y asistiéndolos. Además de monseñor Biasin, la Comisión está compuesta
por monseñor Nelson Westrupp, obispo emérito de Santo André, y monseñor
Paulo Antônio de Conto, obispo emérito de Monte. El consejero es el
padre João Cândido Neto.
Desde su creación, la Comisión ha fortalecido el contacto entre los
obispos eméritos, organizando encuentros, como el Encuentro Nacional de
los Eméritos, o fomentando la comunicación entre los Pastores que han
dejado el gobierno diocesano.
El último Encuentro Nacional de Obispos Eméritos, en su quinta edición,
se realizó en septiembre de 2019, en el Centro Cultural Misionero (CCM)
de Brasilia. En ese momento, el padre João Cândido Neto dijo que el
objetivo de la cita era principalmente demostrar que los Obispos
eméritos no están solos: “La CNBB está con ellos y en este momento cada
Obispo puede compartir parte de su experiencia de vida y su experiencia
pastoral, porque cada uno de ellos, especialmente los que están aquí,
sigue realizando alguna labor pastoral”.
Debido a la pandemia, se pospuso el VI Encuentro Nacional, que iba a
realizarse en 2020. Para este año 2021, la Comisión tiene previsto un
encuentro con los obispos eméritos de las regiones en las que se divide
la CNBB. La idea es reunirlos virtualmente para un momento de reflexión
sobre el tema, “El papel del obispo emérito en una Iglesia sinodal a la
luz de la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe y el próximo
Sínodo de los Obispos”.