CIUDAD DEL VATICANO (http://press.vatican.va - 2 de abril de 2019).- Esta mañana, a las 11.30 horas en la Sala Juan Pablo II de la Oficina de
Prensa de la Santa Sede ha tenido lugar la conferencia de presentación
de la Exhortación Apostólica post-sinodal del Santo Padre FRANCISCO, dedicada a
los jóvenes "Christus vivit", fruto de la XV Asamblea. Ordinario General del Sínodo de los Obispos Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional l (3-28 de octubre de 2018).
Han intervenido S.E. el Cardenal Lorenzo Baldisseri, Secretario General de la Secretaría General del Sínodo de los Obispos, S. E. Mons.
Fabio Fabene, Subsecretario de la Secretaría General del Sínodo de los
Obispos, el Dr. Paolo Ruffini, Prefecto del Dicasterio para la
Comunicación de la Santa Sede, la Sra. Laphidil Oppong Twumasi,
Responsable del Grupo de Jóvenes de la Comunidad de Ghana en la
diócesis italiana de Vicenza y el Prof. Alessio Piroddi Lorrai, Docente
de secundaria de segundo nivel (diócesis de Roma).
El Cardenal Lorenzo Baldisseri definió la Exhortación Apostólica un
"hito" en el camino del sínodo y explicó que “el documento que se
publica hoy constituirá para el futuro próximo la magna carta de
la pastoral juvenil y vocacional en las diversas comunidades eclesiales,
todas marcadas, -aunque de diferentes maneras según las diferentes
latitudes- por una profunda transformación de la condición juvenil”.
“Un primer aspecto de la Exhortación Apostólica –subrayó- es su título: Christus vivit.
Todos sabemos que el íncipit de un documento eclesiástico generalmente
ofrece una clave hermenéutica general para el texto. El mensaje
fundamental que el Santo Padre quiere transmitir a los jóvenes y, con
ellos a todos nosotros, es que Jesucristo no pertenece solo al pasado,
sino también al presente y al futuro, porque Él es la Vida eterna. Cada
generación de creyentes descubre en Cristo un contemporáneo y un
compañero de viaje”.
“Un segundo aspecto –prosiguió- es su caracterización mariana, bien
evidenciada por la elección simbólica del Santo Padre para firmar el
Documento en Loreto, en la casa de María, el pasado 25 de marzo, la
solemnidad de la Anunciación del Señor”.
“Un tercer aspecto que me gustaría resaltar es el estilo del
documento y sus destinatarios. Es una Exhortación Apostólica postsinodal
que asume explícitamente la forma de una "carta" (ver n. 3). Una carta
dirigida ante todo a los jóvenes: por esta razón, en muchas ocasiones
el Papa se dirige directamente a ellos, tuteando a cada uno. Es el
mismo estilo que caracteriza al Santo Padre en sus encuentros con los
jóvenes: un estilo hecho de proximidad, franqueza, sencillez, ternura y
simpatía.
“En cualquier caso –terminó- esta carta se dirige "al mismo tiempo a
todo el Pueblo de Dios, a sus pastores y a sus fieles, porque la
reflexión sobre los jóvenes y para los jóvenes nos convoca y estimula a
todos" (n. 3). Luego, a todos los jóvenes, pero no a solo los jóvenes.
Por este motivo, son numerosos los párrafos en los que el Papa propone
"planteamientos más generales para el discernimiento eclesial" (ibíd.),
consciente de que la cuestión-jóvenes nos concierne a todos y que los
adultos están llamados, al mismo tiempo, a dar y a recibir de los
jóvenes.
A continuación el Obispo Fabio Fabene destacó algunos contenidos de
la Exhortación Apostólica postsinodal, recordando en primer lugar que
era “ significativo que la publicación de este documento tenga lugar en
el aniversario de la muerte de San Juan Pablo II, el Papa que escribió
la primera Carta a los jóvenes y jóvenes del mundo en 1985, con motivo
del Año Internacional de la Juventud”.
Mons. Fabene hizo a continuación hincapié en la “fuerte caracterización
cristológica y en la nota distintiva de amor” que resuena en toda la Christus vivit. “A cada joven el
Santo Padre recuerda: "Dios te ama”... Todo el documento está inspirado
en la confianza que el Papa pone en los jóvenes … y en la invitación
reiterada que les dirige a que fijen la esperanza en Cristo para que
nadie se la robe”.
Entre los muchos elementos que podrían ser subrayados, el Subsecretario
Fabene citó en primer lugar “la relación que el Santo Padre muestra
entre los jóvenes y todo el Pueblo de Dios, pastores y fieles (...). No
hay una "Iglesia de los jóvenes". Y tampoco hay una "Iglesia con los
jóvenes o para los jóvenes". Hay un solo "cuerpo", la Iglesia, de la
cual los jóvenes son miembros vivos y creativos, que contribuyen, con su
propia pertenencia, al " vivir bien" de todos y a la misión de
proclamar el Evangelio y la belleza de la vida en Cristo de toda la
comunidad eclesial”.
En armonía con los Padres reunidos el pasado octubre en Roma, el Papa
FRANCISCO reafirma firmemente “la importancia de la sinodalidad en la
Iglesia. Subraya que la misma pastoral juvenil debe ser sinodal y, por
lo tanto, capaz de dar forma a un "caminar juntos" (...) Emerge en el
texto casi una propuesta de alianza que el Santo Padre dirige a los
jóvenes: una invitación a colaborar para construir un futuro mejor, en
particular con respecto a aquellas áreas identificadas por la Asamblea
sinodal como nudos cruciales' que atraviesan la vida de la Iglesia y la
sociedad: el entorno digital, los migrantes, el tema del abuso infantil.
Refiriéndose en concreto a la colaboración que el Papa pide a los
jóvenes respecto al tema de las migraciones, Mons. Fabene explicó que
“va en la dirección de favorecer un enfoque equilibrado de la
problemática. Se les pide, en efecto “que no caigan en las redes de
quienes quieren enfrentarlos a otros jóvenes que llegan a sus países,
haciéndolos ver como seres peligrosos y como si no tuvieran la misma
inalienable dignidad de todo ser humano.”.(ChV 94)
“Entre las diversas contribuciones, diseminadas en el texto que los
jóvenes pueden ofrecer, -concluyó- me gustaría destacar una más: la
comunicación a otros jóvenes de la belleza de la experiencia personal
del encuentro con Cristo. Enamorados de él y deseosos de testimoniar el
Evangelio con sus vidas, están invitados a dar a conocer a Jesús
Salvador a todos, incluso a aquellos que parecen estar más alejados e
indiferentes, hasta las periferias existenciales extremas”.
La Sra. Laphidil Oppong Twumasi, Responsable del Grupo de Jóvenes de
la Comunidad de Ghana en la diócesis italiana de Vicenza, que colaboró
en la redacción del Documento Presinodal, del que la Exhortación ha
recogido enteros párrafos, manifestó su complacencia porque Christus vivit
no es “solamente un manual de doctrina y de enseñanzas, sino más bien
una guía y un conjunto de sugerencias, algo a lo que referirse cuando
nos sentimos un poco perdidos. No tiene respuestas ya confeccionadas
para nuestras preguntas (...) Ahora depende de nosotros, como jóvenes
en la Iglesia, insertados en la pastoral juvenil, en las parroquias, en
los diversos grupos eclesiales, en las unidades pastorales en general,
levantarnos y trabajar duro. Debemos tomar el documento final del Sínodo
y esta exhortación apostólica, extrapolar los temas y realidades más
cercanos a nosotros y adaptarlos a nuestras necesidades”.
“Esto me dice que hay una necesidad mutua, que debe haber una
relación cercana entre la Iglesia "adulta" y la Iglesia "joven", porque
nosotros los jóvenes tenemos fuerza, entusiasmo, carisma, pero
necesitamos la experiencia y el conocimiento de los adultos que nos
muestren el camino y nos ayuden a canalizar nuestros dones. Tienen que
caminar a nuestro lado para ayudarnos a realizar nuestras ideas y
nuestros sueños”.
Por su parte el Profesor Alessio Piroddi Lorrai abordó el texto desde
el punto de vista de su profesión de maestro, catequista y educador,
observando que en el corazón de todos hay la misma lucha que entre el
joven rico del Evangelio y el apóstol Pedro y que para la Iglesia y para
cualquier persona que se ocupe de educación se convierte en “la lucha
contra una cultura que nos quiere huérfanos, por lo tanto, sin raíces y,
en definitiva, solos”.
“¿Cómo responder a este reto?”, se preguntó, agregando que para
hacerlo tomaba “una de las indicaciones del Santo Padre, entre las
muchas presentes en el texto: "hacer casa". Las parroquias y las
escuelas deben saber cómo ofrecer un lugar donde cada uno pueda sentirse
como en casa, amado de forma gratuita y al mismo tiempo acompañado,
guiado, incluso corregido, pero con el deseo de que cada uno llegue a
dar su mejor fruto gracias a esta "casa". El Papa FRANCISCO escribe que
la Iglesia es joven no cuando persigue la última moda, sino cuando
regresa a la fuente de su origen, a Aquel que hace nuevas todas las
cosas.
Por último el Prefecto del Dicasterio para la Comunicación, Dr. Paolo
Ruffini centró su intervención en algunos puntos de la Exhortación que
conciernen la comunicación en sentido amplio.
“Lo primero que me gustaría decir –afirmó- es que esta Exhortación
testimonia la verdad, -también comunicativa- del camino sinodal de la
Iglesia. Un camino que no termina aquí, sino que continúa; que no se
detiene, sino que prosigue precisamente porque los más ancianos pueden
pasar el testigo a los más jóvenes”.
El segundo punto se refiere a “la necesidad de que los comunicadores
no intercambiemos la parte con el todo, acabando por dar una
representación falsa de la realidad. En nuestro caso, de los jóvenes y
de la Iglesia. También en esto –indicó- la Exhortación me parece que
usa palabras muy claras asumiendo el punto de vista, la mirada amplia de
los jóvenes, quienes por un lado no quieren ver una Iglesia silenciosa y
tímida, pero tampoco siempre en guerra por dos o tres temas que la
obsesionan y por el otro piden a su vez, que se les mire, se les
comprenda, en su compleja totalidad. Que está hecha de sueños, de
ideales, de dramas, de sufrimiento”.
En tercer lugar el Prefecto citó “el ambiente digital que
caracteriza la comunicación contemporánea” y que es “un contexto de
participación sociopolítica y de ciudadanía activa, un lugar
irrenunciable para llegar a los jóvenes e implicarlos incluso en
iniciativas y actividades pastorales (ChV 87)", pero es también “un
territorio de soledad, manipulación, explotación y violencia, hasta
llegar al caso extremo del dark web (ChV 88) ». “Estos circuitos
cerrados facilitan la difusión de informaciones y noticias falsas,
fomentando prejuicios y odios. La proliferación de las fake news es expresión de una cultura que ha perdido el sentido de la verdad y somete los hechos a intereses particulares ChV 89).
“A todo esto, el Papa contrapone una forma diferente de vivir no
solo la red, sino todos los lenguajes. También el del silencio, de la
contemplación. El arte, la música, el deporte. La caridad, El compromiso
social. La política. Invirtiendo la perspectiva. Reconectando lo real y
lo virtual”.
“También en términos de abuso, la cuarta cuestión de la que me
gustaría hablar, -dijo- la Exhortación nos invita a una comunicación
transparente y verdadera. Completa, no parcial. Nos pide gratitud con
aquellos que han tenido y tienen el coraje de denunciar el mal sufrido,
ayudando a la Iglesia a tomar conciencia y reaccionar de manera decisiva
….Reitera su compromiso con la adopción de estrictas medidas
preventivas que eviten la repetición de delitos inaceptables. Pide a los
jóvenes que aporten su capacidad para renovar, reclamar, exigir
coherencia y testimonio”.
“Lo último que me gustaría subrayar es la insistencia del Papa, en la
Exhortación, en la comunicación intergeneracional como una clave para
la renovación de la Iglesia... Con esta conciencia, Francisco invita a
los jóvenes a no estar en el balcón,… a involucrarse, a ensuciarse las
manos, a tener fe y a soñar; no para abstraerse de la realidad, sino
para cambiarla también a través de su capacidad para comunicarse, para
convertirse en líderes populares. "¡No dejen que otros sean los
protagonistas del cambio!" (ChV 174).