Ouagadougou, BURKINA FASO (Agencia Fides, 04/04/2019) - Al menos 62 personas perdieron la vida
cerca de Arbinda, en el norte de Burkina Faso, en la frontera con Mali,
en un ataque yihadista seguido de enfrentamientos entre comunidades,
entre el domingo 31 de marzo y el martes 2 de abril.
Según el Ministro de Administración Territorial, Siméon Sawadogo, 32
personas fueron asesinadas por terroristas y otras 30 murieron en los
enfrentamientos y represalias entre las comunidades Kouroumba, Peuls,
Mossis,
Los enfrentamientos comenzaron después de la noche del domingo cuando
individuos armados entraron en la aldea de Hamkan, a 7 km de Arbinda,
donde mataron al jeque de la aldea, el hijo mayor y su sobrino. “Después
del asesinato de Sheikh Werem, hubo enfrentamientos entre las
comunidades de Arbinda, que provocaron represalias en ambos lados”,
explicó el ministro Sawadogo. La violencia provocó el desplazamiento de
las poblaciones que habían huido de los pueblos de los alrededores.
En Burkina Faso, al igual que en Mali, las tensiones degeneran
periódicamente en violencia entre los Peuls (o Fulani), una población de
pastores nómadas y musulmanes presentes en todo el oeste de África, y
agricultores indígenas.
Algunos Peuls se han unido a los grupos yihadistas, por lo que, como
sucedió en este caso, las poblaciones locales han identificado al grupo
yihadista que los atacó con los Peuls, causando sangrientas represalias
que a su vez alimentan los conflictos intercomunitarios. En el vecino
Malí el 24 de marzo, al menos 160 personas del grupo étnico Peuls fueron
masacradas en la aldea de Ogossagou.
En Burkina Faso todavía no hay noticias de que el padre Joël Yougbaré
desaparecido el domingo 17 de marzo en el norte del país. En su mensaje para la Cuaresma, los obispos locales
pidieron a las autoridades que pongan fin a la violencia e invitaron a
los fieles a ayunar y rezar por la paz en el país.