Caracas, VENEZUELA (Agencia Fides, 03/04/2019) – “Ante la gravedad de la situación que vivimos
en Venezuela, los Obispos, interpretando como pastores los clamores y
anhelos de nuestras comunidades, hemos escrito varios mensajes con
referencia a la realidad propia de las Iglesias locales. Desde el
anuncio del Evangelio, se ha iluminado lo que está viviendo, sufriendo y
esperando la gente”. Así inicia el “Mensaje al pueblo de Dios Y a las
personas de buena voluntad en Venezuela” firmado por la Presidencia de
la Conferencia episcopal venezolana, con fecha del 2 de abril. En el
texto, recibido por la Agencia Fides, los Obispos reafirman ante todo
"la dignidad de la persona humana y sus derechos inalienables". Por lo
tanto, el documento señala los "crímenes de lesa humanidad" que ocurren
en Venezuela. Estos incluyen los asesinatos y la represión de los
pueblos indígenas pemones y otros grupos étnicos; la deportación forzada
de colombianos y venezolanos;
encarcelamiento tortura de presos políticos; falta de acceso a alimentos
y medicinas; Arresto, detención o secuestro por parte de las fuerzas
estatales ...
Ante todo esto, "invitamos a las Fuerzas Armadas a sentirse parte de un
pueblo que debe ser defendido y servido, actuando de acuerdo con su
conciencia", exhortan los Obispos.
"Expresamos nuestra profunda preocupación por los apagones recurrentes a
nivel nacional que, entre otras cosas, agravan aún más el suministro y
la crisis de conservación de alimentos y medicinas", señalan. A esto se
suma el empeoramiento de la falta de agua potable en muchas zonas del
país que, en general, "amenaza con degenerar en una situación de salud
catastrófica".
En la conclusión del mensaje, los Obispos escriben: "Al final de la
Cuaresma solo podemos celebrar la Pascua del Resucitado, auténtico
liberador de la humanidad, si todos los creyentes y personas de bien se
unen a nuestros esfuerzos para iluminar el esplendor de la dignidad
humana" Instamos a aquellos que están atacando a sus hermanos a morir en
crímenes contra la humanidad para salir de la oscuridad. Es necesario
construir puentes y romper los muros de la división, para construir una
patria que sea la casa de todos. Es nuestro desafío", ¿lo asumiremos?"
El mensaje de los obispos llega unos días después de la publicación del
Informe de las Naciones Unidas sobre Venezuela. De los 29 millones de
habitantes, el 94% padece actualmente hambre y pobreza extremas. Al
menos 3.5 millones de venezolanos ya han huido hacia Perú, Colombia,
Brasil, Guayana y Suriname, así como a Curazao y otras islas del Caribe.
Los niños en edad escolar ya no asisten a la escuela y los enfermos no
pueden ir a los hospitales porque falta todo. El número de personas que
mueren por falta de medicamentos que salvan vidas de todo tipo crece
cada día.
El Arzobispo Emérito de Caracas, el cardenal Jorge Urosa Savino, sugiere
una solución: ayer, en algunas declaraciones a la prensa internacional,
dijo: "Esta terrible crisis refleja la incapacidad de los gobernantes
actuales para llevar la vida del país. Son simplemente incapaz de
gobernar venezuela ". Por lo tanto, la "solución radical pero pacífica
de la crisis es que Maduro, ya rechazado por la mayoría de la población,
se haga a un lado y ceda el poder que de hecho ocupa". "Es necesario
aceptar la presidencia interina del Presidente de la Asamblea Nacional,
Juan Guaidó, que se proponga un gobierno de transición, previsto por el
artículo 233 de la Constitución, para que se puedan celebrar elecciones
transparentes y pueda comenzar una verdadera recuperación del país"
concluyó el cardenal.