“Muchos fieles se han movilizado para ayudar a los pobres de la región central que padecen hambre y están atravesando una gran precariedad. Lo hacemos con todo nuestro corazón, como expresión de la caridad cristiana”, dice el padre Nguyen Phuc de la parroquia de Tan Luong, municipio de Hai Chanh, provincia de Quang Tri.
Según la información de la Agencia Fides, el obispo Paul Nguyen Thai Hop, que dirige la diócesis de Hà Tinh, ha visitado recientemente algunas de las zonas afectadas por las inundaciones, llevando alivio, solidaridad y consuelo a los desplazados. Caritas Vietnam, la “Ha Tinh Catholic Business Association” y otras organizaciones religiosas han intensificado sus esfuerzos para ayudar a los afectados.
En la región central de Vietnam, aldeas enteras de la provincia de Quang Tri y Quang Nam están sumergidas por las inundaciones, que también han reducido el suministro de alimentos de miles de residentes. Más de 50.000 desplazados internos han sido reubicados en terrenos más altos, según lo informado por las autoridades vietnamitas de gestión de desastres. Más de 109.000 hogares y 584 hectáreas de cultivos están dañadas, mientras que carreteras y puentes están destruidos. Según las autoridades, la situación podría empeorar ya que otra tormenta tropical, llamada Linfa, traerá un nuevo ciclo de fuertes lluvias en breve.
Vietnam es propenso a tormentas destructivas que provocan inundaciones y deslizamientos de tierra, siendo las zonas costeras centrales las más vulnerables. Los desastres naturales, en su mayoría inundaciones y deslizamientos de tierra causados por tormentas, se han cobrado la vida de 132 personas y herido a otras 207 el año pasado. El país a menudo se ve afectado por el clima severo en la temporada de lluvias entre junio y noviembre.