Foto: EFE
CIUDAD
DEL VATICANO, 6 enero 2014 (VIS).- El Papa FRANCISCO visitó ayer a
las cuatro de la tarde, de forma privada, la parroquia romana de San
Alfonso de Liguori, para ver el pesebre viviente organizado por los
fieles de la parroquia y representado por 200 personas. De esta forma
el Papa ha respondido a la invitación que le hicieron los fieles de
la misma.
Junto
a más de tres mil personas, han recibido al Pontífice el cardenal
Agostino Vallini, vicario general de Su Santidad para la diócesis de
Roma; el obispo Guerino Di Tora y el párroco, don Dario Pompeo
Criscuoli.
El
Santo Padre, como nos tiene acostumbrados, ha vuelto a dar ejemplo de
su calor y cercanía a la gente saludando a todos los presentes.
FRANCISCO bromeó con los más pequeños, cogió en brazos uno de los
corderitos que formaban parte del belén, y hasta tuvo tiempo para
probar la ricotta hecha por los parroquianos.