Inaugurado el Año judicial del Tribunal del Vaticano

CIUDAD DEL VATICANO, 14 ENE 2012 (VIS).-  Este sábado, día 14, se celebró la ceremonia de inauguración del LXXXIII Año Judicial del Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano, con la asistencia de numerosas autoridades religiosas y representantes del gobierno y la justicia italianos, entre los que cabe destacar la ministra de Justicia, Paola Severino.

  Los actos comenzaron con la Santa Misa, celebrada por el Cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado, en la capilla del Palacio de la Gobernación. En su homilía, el Cardenal Bertone subrayó que "con ocasión del inicio del nuevo Año Judicial, siguiendo la Palabra de Dios, (...) estamos nuevamente invitados a reflexionar sobre la relación entre la justicia divina y la humana; a dejar iluminar nuestras conciencias para que nuestro actuar corresponda en la medida de lo posible a la divina voluntad, a su diseño de amor por cada persona y por la comunidad de los hombres". Asimismo, recordó la peculiar vocación de la Iglesia, llamada a ser en el mundo signo e instrumento del amor de Dios y de su justicia, que es siempre la expresión de su amor misericordioso.

  Seguidamente, el Promotor de Justicia del Tribunal, Nicola Picardi, presentó la Relación inaugural. Inició recorriendo la historia judicial vaticana, para tratar a continuación los aspectos más novedosos de las normativas recientes. Estas nuevas reglas han sido inspiradas por la evolución de las relaciones internacionales, que ha suscitado la necesidad de adoptar un modelo institucional capaz de confrontarse con los de las otras naciones, y de hacer frente a la difusión de la criminalidad.

  Una amplia reforma del código penal vaticano, junto con algunas innovaciones en materia administrativo-financiera, se ha hecho necesaria a partir de la firma de la Convención monetaria entre la Unión Europea y el Estado de la Ciudad del Vaticano, en el 2009. Así, en el 2010 se han adoptado medidas apropiadas para uniformar la legislación a los estándares europeos por lo que se refiere a la prevención del blanqueo de dinero, el fraude y la falsificación de los medios de pago.

  Desde el 1 de Marzo de 2011, se han introducido en el código penal vaticano normas referentes al fraude y a la falsificación del euro; desde el 1 de Abril, las relativas a la prevención y la lucha contra el blanqueo de dinero procedente de actividades criminales y de la financiación del terrorismo. Esta última normativa se extiende también a los sujetos vaticanos que trabajan en actividades económico-financieras y monetarias, que deberán verificar cuidadosamente a la clientela, con el deber de señalar las operaciones sospechosas a la Autoridad de Información Financiera (Aif), instituida en el Vaticano para luchar contra las actividades económicas ilegales, y que colabora con las correspondientes autoridades de otros Estados.

  Otro punto importante se refiere al Motu proprio para la prevención y la lucha contra las actividades ilegales en el campo financiero y monetario, del 30 de Diciembre de 2010, en el que S.S. Benedicto XVI ha querido plasmar sus enseñanzas sobre la ética de la economía contenidas en la "Caritas in veritate". En dicho Motu proprio se establece que los dicasterios de la Curia romana y todos los organismos y entes dependientes de la Santa Sede que realizan actividades económico-financieras y monetarias, incluido el Instituto para las Obras de Religión, están sujetos a la normativa contra el blanqueo y la financiación del terrorismo.

  Finalmente, otra novedad que cabe destacar es que, en algunas materias, el Tribuanl del Estado de la Ciudad del Vaticano ha extendido su propia jurisdicción más allá de las fronteras vaticanas, respecto a sujetos y entes eclesiásticos que, anteriormente, estaban fuera del alcance del derecho vaticano.