''La desaparición del venerado Cardenal -escribe el Pontífice- suscita en mi ánimo una emoción profunda y una admiración sincera por un estimado hombre de Iglesia que vivió con humildad y fidelidad su largo y fecundo sacerdocio y episcopado al servicio del Evangelio y de las almas que le fueron confiadas. Recuerdo con gratitud su ferviente ministerio, primero como vicepárroco en los años duros de la guerra, en las periferias romanas marcadas por el sufrimiento y la pobreza; después como párroco en dos populosas barriadas, dedicado a educar, especialmente a los jóvenes, en la alegría de la fe. Nombrado Obispo Auxiliar de Roma se dedicó con intensidad apostólica a las exigencias espirituales y materiales de la gente mientras participaba asiduamente a los trabajos del Concilio Vaticano II. En el ministerio episcopal en Tortona, después como Vice-regente y Arzobispo de Cagliari y, por último de Génova-Bobbio, testimonió con sabiduría pastoral su generosa atención a las necesidades de los demás, saliendo al encuentro de todos con bondad y mansedumbre. Rezo fervientemente para que el Señor acoja al llorado cardenal en la alegría y la paz eterna y le envío, junto a los que comparten el dolor por su fallecimiento, la consoladora bendición apostólica con un pensamiento especial a las Hermanas Apóstolas del Sagrado Corazón de Jesús que lo han acudido amorosamente sobre todo en estos últimos años de enfermedad''.
jueves, 30 de abril de 2015
Telegrama por la muerte del Cardenal Giovanni Canestri: "Pastor sabio y atento a las necesidades de todos"
CIUDAD DEL VATICANO, 30 de abril 2015 (VIS).- El Papa FRANCISCO ha enviado un telegrama de pésame al Cardenal Agostino Vallini, Su Bicario para la diócesis de Roma, con motivo del fallecimiento ayer a los 97 años, del Cardenal Giovanni Canestri, que fue Arzobispo de Génova (Italia) entre 1987 y 1995. El purpurado, oriundo de la diócesis de Alessandria, pertenecia al clero de Roma.