Budapest, HUNGRÍA (Agencia Fides, 26/09/2019) - "Jesús habla del Reino de Dios en la quinta
parábola del grano de mostaza. Una semilla que es muy pequeña, crece
hasta convertirse en una planta grande y luego da fruto, incluso los
pájaros del cielo hacen sus nidos en sus ramas. Algo similar ocurrió en
suelo húngaro hace diez años. Una pequeña semilla que fue plantada hace
10 años ha crecido hasta convertirse en una planta grande y ahora da
muchos frutos". Así lo escribió Benvin Sebastian, SVD, director nacional
de las Obras Misionales Pontificias de Hungría, en una nota recibida
por la Agencia Fides con ocasión del décimo aniversario de la Pontificia
Obra Misionera Infantil en su país, celebrada el 21 de septiembre. "Cuando el comunismo terminó en Hungría en 1992, las Obras Misionales
Pontificias (O.M.P.) comenzaron su misión de nuevo -dice-, pero tardaron
muchos años en comenzar la Obra Pontificia Misionera de la Infancia. En
2009 empezamos con 34 niños. Ahora
tenemos 31 comunidades con más de 1000 niños que oran y recaudan fondos
con sus pequeños sacrificios por la misión de la Iglesia universal".
La celebración del décimo aniversario tuvo lugar en la Basílica de San
Esteban de Budapest y en el Parlamento húngaro. A las 10 de la mañana el
obispo Auxiliar de Esztergom-Budapest recibió a los niños, seguido de
la intervención del representante de la Comisión Episcopal para las
Misiones, László Kiss- Rigó. Luego fue el turno del mensaje del nuncio
apostólico, Michael August Blume, SVD, y el informe del director
nacional de las OMP, p. Benvin Sebastian, SVD. Más tarde, a las 11.15
horas, el cardenal Peter Erdo, arzobispo de la Diócesis de
Esztergom-Budapest, presidió la santa misa de acción de gracias.
Por la tarde, los niños fueron recibidos en el edificio del Parlamento,
donde se leyó el mensaje del presidente húngaro y del presidente del
Parlamento. A continuación, Soltész Miklos, secretario de Estado para
las Iglesias, las Minorías y los Asuntos Civiles, pronunció un discurso.
"Concluimos la celebración del Jubileo rezando por todo el mundo y por
los líderes del mundo, en particular por los líderes húngaros. Además,
la presencia de la hna. Roberta Tremarelli AMSS, secretaria general de
la Pontificia Obra de la Infancia Misionera, enriqueció y animó la
celebración. Pudo visitar una parroquia y una escuela greco-católica
donde la Obra está activa", escribió el director nacional de las OMP.