Asunción, PARAGUAY (Agencia Fides, 30/09/2019) – La Coordinación Nacional de Pastoral Indígena
(CONAPI) celebra su 50 aniversario en Paraguay y para ello celebró un
Congreso Internacional los días 27 y 28 de septiembre, que tuvo lugar en
el Seminario Metropolitano de Asunción.
Mons. Adalberto Martínez Flores, Obispo de Villarrica y Presidente de la
Conferencia Episcopal de Paraguay (CEP), pronunció el discurso inicial
del Congreso, al que también asistieron Mons. Lucio Alfert, Mons.
Joaquín Robledo, Mons. Pedro Collar, Mons. Celestino Ocampos. La
conferencia principal fue presentada por Mons. Felipe Arizmendi, obispo
emérito de San Cristóbal de las Casas (Chiapas, México).
Monseñor Martínez Flores presentó el trabajo del Congreso: "Durante este
viaje de 50 años, los pueblos indígenas han logrado muchos resultados,
como la titulación de la tierra, la aprobación de la educación y las
leyes alimentarias favorables para los pueblos indígenas. Lucharon para
la soberanía. Otro resultado importante fue la integración, respetando
las diferencias culturales y gracias al trabajo de los misioneros,
especialmente en las áreas misioneras ".
Luego agregó: "El Papa Francisco declara que para los pueblos indígenas
la tierra no es un bien económico, sino un regalo de Dios y de los
antepasados que descansan allí. Es un espacio sagrado con el que deben
interactuar para apoyar su identidad y sus valores. Cuando permanecen
en sus territorios, son los que cuidan la tierra en el mejor de los
casos ... Sin embargo, en varias partes del mundo, por diversas razones,
se ven obligados a abandonar sus tierras para proyectos agrícolas o
mineros que no prestan atención a la degradación de la naturaleza y la
cultura ".
El orador principal, Mons. Felipe Arizmendi, dijo en su discurso:
"Cuando el Papa Francisco llegó a Chiapas (febrero de 2016) mientras yo
era Obispo de San Cristóbal de las Casas, algunos me preguntaron: ¿qué
dejó la visita del Papa? Respondí: por el aspecto económico, dejó mucho
dinero, porque atrajo a muchas personas a la ciudad, a los hoteles, y
todos se beneficiaron ... Pero lo más importante de su visita fue que
los nativos se hicieron más conscientes de la situación, se dieron
cuenta que son importantes para la Iglesia, que son preciosos y que
también debemos aprender de ellos ". Refiriéndose luego a Paraguay,
comentó:" La Conferencia Episcopal ya vien comprometiéndose por 50 años
de esfuerzos para servir mejor a estas poblaciones, pero queda mucho por
hacer. Más que hacer. Este congreso quería ayudar a crear conciencia
sobre la importancia de estar con ellos ".
La Coordinación Nacional de Atención Pastoral Indígena (CONAPI) ahora
tiene 5 décadas de vida institucional: nació en 1969 con el nombre de
Departamento de Misiones, luego en 1976 se convirtió en el Equipo
Nacional de Misiones y finalmente, en 1994, se convirtió en la
Coordinación Nacional de Pastoral Indígena. Su primer presidente fue
Mons. Alejo Obelar, del Vicariato Apostólico de Pilcomayo y su primer
secretario ejecutivo fue el Padre Bartolomeu Meliá, SJ.