Freirina, Chile (Agencia Fides, 23/05/2012) - La protesta de la población de Freirina por la contaminación ambiental, la falta de agua limpia y el aire irrespirable, causados por la empresa Agrosuper ha obtenido su efecto: la planta estará cerrada hasta que cumplan con las normas ambientales.
En un reunión a la que asistieron todas las autoridades del país, autoridades regionales, representantes de los agricultores, organizaciones sociales, dos ministros del gobierno (Salud y Medio Ambiente), las autoridades de la Iglesia (Mons. Gaspar Quintana, Obispo de Copiapó, el Vicario General, padre Alejandro Castillo, el Vicario de la zona sur, el Padre Mario Campillay, el párroco del pueblo, el padre Franklin González), fueron aprobados dos puntos: Primero: la intervención de la autoridad en la planta de Agrosuper. Segundo: el cierre inmediato de la planta por no haber cumplido las normas ambientales, medida temporal hasta que se pueda garantizar su correcto funcionamiento según las normas ambientales.
La nota enviada a la Agencia Fides contiene el comentario de Su Exc. Mons. Quintana: "es un gran paso haber logrado este objetivo, ahora debemos preguntarnos qué aprendemos de esto, para discernir el bien común, valorar la dignidad de la persona, el dialogo y el encuentro de las autoridades con la gente". Después el Obispo ha añadido: "la persona humana es la medida de todas las decisiones, que deben ser guiadas por el bien común, y lo más importante es que la gente viva con dignidad, paz y alegría".
