lunes, 28 de octubre de 2013

Fundación Juan Pablo II para el Sahel: innovar para un mejor servicio a los pobres


Ouagadougou, BURKINA FASO (Agencia Fides, 28/10/2013) – Es necesario renovar la “Fundación Juan Pablo II para el Sahel”, con el fin de que pueda realizar su servicio en la mejor manera posible para combatir la sequía y la desertificación en el Sahel, realizando en el día a día cotidiano, la caridad del Papa; es la conclusión a la que se ha llegado durante los trabajos del Consejo de administración de la Fundación, que terminan hoy en Ouagadougou. Según la nota enviada a la Agencia Fides por la Curia diocesana de Bissau, esta sesión extraordinaria fue inaugurada el 25 de octubre con las intervenciones del Arzobispo de Ouagadougou, Su Exc. Mons. Philippe Ouedraogo; del Presidente del Consejo de Administración de la Fundación, Su Exc. Mons. Jean-Pierre Bassène, Obispo de Kolda (Senegal); del Nuncio apostólico en Burkina-Niger, el Arzobispo Vito Rallo, y del Card. Robert Sarah, Presidente de Cor Unum. En sus 30 años de vida, la Fundación ha cumplido con su misión de ser el “buen samaritano” para la s personas más necesitadas de los nueve países que abraza (Burkina Faso, Cabo Verde, Chad, Gambia, Guinea Bissau, Malí, Mauritania, Níger y Senegal), que ahora están al centro de los trabajos de esta reunión. La cuestión que se plantea es sobre los caminos a seguir para continuar en el mejor modo posible, el apoyo a las poblaciones pobres en su lucha contra la sequía en el Sahel.