Guadalajara, México (Agencia FIDES, 2/5/2012). El 80% de los niños
del Estado de Jalisco, sufren de todo tipo de violencia, desde gritos,
maltratos verbales, violencia física cruel y desmedida para con los
pequeños.
El 11% de los menores que trabajan en la calle son explotados. Todos
estos abusos causan serios daños psicológicos y emotivos. Los
especialistas han registrado casos de depresión y estrés incluso en
menores de hasta seis meses de edad.
Los síntomas más evidentes y constantes son los trastornos de
ansiedad, depresión, bajo rendimiento académico, aislamiento,
problemas al dormir. Muchos piensan o intentan el suicidio, pero la
característica más común es que son niños violentos.
Estos niños se ven obligados a trabajar en las calles, no tienen
sueños, no quieren juguetes, solo trabajar para dar el dinero a sus
padres para tener lo suficiente para comer. El 59.4% de los niños
trabajadores son explotados por sus familias, y alrededor de un 20%
son "contratados" por gente ajena.
Además, el 7% de estas pequeñas víctimas son utilizadas en el mercado
sexual y la prostitución; situación que se agrava en las localidades
turísticas.
Con motivo del Día del Niño, que se acaba de celebrar, los
especialistas no han pedido regalos para los niños sino atención,
cariño y compromiso real, puesto que son las próximas generaciones de
adultos que estarán al frente de la sociedad. Hace falta crear
espacios adecuados para los menores que trabajan en la calle y darles
la posibilidad de que puedan seguir estudiando, urgen escuelas
adecuadas para acogerles, con maestros capacitados para atender estos
"casos especiales", padres cariñosos y respetuosos del crecimiento de
los menores.