miércoles, 9 de noviembre de 2011

Tras la muerte de líderes de las FARC, la Iglesia reafirma que el camino hacia la paz es el diálogo y no la violencia

BOGOTÁ, COLOMBIA (Agencia Fides 8/11/2011).  El Secretario de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), su excelencia monseñor Juan Vicente Córdoba, Auxiliar de Bucaramanga, ha expresado la esperanza de que la muerte del líder a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) , conocido como "Alfonso Cano", no desate una nueva ola de violencia y reiteró su invitación a participar en el diálogo por la paz. La noticia de la muerte de Cano fue confirmado en la pasada noche del 4 de noviembre, responsable del ejército de "La Odisea", realizada en el departamento del Cauca, en el sur-oeste del país.

La muerte de Cano se produjo después de la muerte de Luis Edgar Devia, alias Raúl Reyes, en marzo de 2008 en Ecuador, y de Víctor Julio Suárez Rojas, alias 'Mono Jojoy', en septiembre de 2010. Cano fue considerado como el ideólogo de las FARC, relevado por Manuel Marulanda Vélez en 2008, también conocido como Tiro Fijo, murió después de 40 años al frente de la guerrilla narco-terrorista.
 
Monseñor Córdoba dijo que la Iglesia no se alegra y nocelebra la muerte de nadie, ni la de Guillermo León Sáenz Vargas (cuyo verdadero nombre es Alfonso Cano), sino que comprende el conflicto en el país y reconoce la labor de los militares para cumplir el deber de mantener el orden en la nación.
 
En la nota enviada a la Agencia Fides de los estados de EWTN se puede leer que el secretario de la CEC ha evidenciado que estos guerrilleros muertos "tienen una familia y una dignidad. Sin embargo, el ejército debe asumir la responsabilidad de la seguridad y lo está haciendo bien ", y añadió:". La violencia trae más violencia, pero a veces se justifica cuando se trata de la defensa de la vida o la orden de un país. 
Esta no es la forma ideal. Como Iglesia reafirmamos que el camino hacia la paz es el diálogo".
 
Con respecto a las FARC, el obispo dijo: "entre los guerrilleros, Alfonso Cano fue uno de los más preparados y tal vez uno de los más dispuestos a la posibilidad de diálogo, ahora no se sabe quién se hará cargo de esto, pero debemos ser realistas y decir que la violencia no es la forma o el método para realizar los ideales nobles como la justicia, la igualdad y la lucha contra la pobreza".