lunes, 23 de junio de 2014
Arzobispo Nona: “Estatua de la Virgen destruida por los islamistas, pero los sufrimientos de los cristianos no se conviertan en pretexto para la propaganda”
Mosul, IRAQ (Agencia Fides) – El arzobispo caldeo de Mosul, Su Exc. Mons. Amel Shamon Nona, confirma a la Agencia Fides la destrucción de una estatua de la Virgen María por parte de los insurgentes sunitas que han tomado el control de la ciudad, pero añade que por el momento no hay pruebas de que los rumores sobre un “impuesto islámico” a pagar por los cristianos en Mosul a los islamistas del Estado Islámico de Iraq y el Levante sean ciertos. “Una estatua de la Virgen María” refiere a la Agencia Fides el arzobispo Nona “fue destruida por los militantes islamistas que habían tirado abajo una torre de la iglesia caldea de la Inmaculada Concepción. El santuario es un lugar de culto frecuentado por los fieles”, añade Mons. Nona, “y durante la remoción y destrucción de la estatua de María, el interior de la iglesia no ha sido violado. Han sufrido la misma suerte otras estatuas de la ciudad”. La campaña iconoclasta librada por los insurgentes islamistas en Mosul y el norte de Iraq se has desencadenado incluso contra estatuas como la dedicada a Mullah Osman Musli y otra dedicada al poeta Abu Tammam.
El arzobispo caldeo de Mosul por el momento no confirma los rumores que circulan acerca de un supuesto “impuesto personal” a los cristianos en Mosul por parte de militantes islamistas del Estado Islámico de Iraq y del Levante. Diferentes fuentes insisten en que los cristianos que se han quedado en la ciudad son muy pocos, en su mayoría ancianos. “Hasta ahora”, dice Mons. Nona, que también se ha trasladado a la aldea de Tilkif, “sólo a ciertos empleados públicos cristianos se les ha dicho que no volvieran a su lugar de trabajo, haciendo referencia expresa a su condición de miembros de una minoría. Por supuesto, la situación es cada vez peor, y todos estamos preocupados. Pero también veo que la condición de los cristianos a veces se convierte en objeto de operaciones de propaganda. Es una manipulación peligrosa incluso para los mismos cristianos: hablan de nosotros, pero en realidad apuntan a otros fines”.
El domingo 22 de junio en una entrevista televisiva, el ministro iraquí de Derechos Humanos Mohammed Shia al Sudani, acusó a los milicianos suníes de Isil de haber cometido atrocidades entre la población de la llanura de Nínive, quemando iglesias, imponiendo impuestos a las comunidades cristianas y violentando a las mujeres cristianas, cinco de las cuales, según el ministro, se habrían suicidado después de haber sido objeto de violencia.