Estambul, TURQUÍA (Agencia Fides, 17/12/2019) - "Nos duele ver que los acontecimientos que
sucedieron a los armenios hace 100 años en estas tierras sean
transformados en instrumentos de presión económica, política o
estratégica por parte de los parlamentos de otros estados. Creemos que
esto lleva a una situación que se muestra inapropiada para con nuestros
antepasados”. Así lo afirma el nuevo Patriarca armenio de Constantinopla
Sahak II Machalyan, en las primeras declaraciones públicas publicadas
por la prensa turca después de su elección patriarcal y haciendo una
clara referencia a la resolución aprobada el jueves 12 de diciembre por
el Senado de los Estados Unidos que reconoció el carácter genocida de
las masacres de armenios perpetradas durante la Primera Guerra Mundial
en los territorios de la península de Anatolia. Los medios nacionales
dan un amplio espacio a la postura adoptada por el nuevo Patriarca,
evidenciando la fuerte connotación de sus primeros pasos en este nuevo
mandato eclesial. En una entrevista con Sabah, inmediatamente después de
la votación del Senado de los Estados Unidos; el recién elegido
patriarca armenio había minimizado diciendo: "Estas cosas no deben
tomarse demasiado en serio", además Sahak II, había señalado que los
parlamentos tienen la tarea institucional de aprobar leyes y
resoluciones, y esto no implica ninguna participación por parte de las
comunidades y las autoridades eclesiales armenias. Al mismo tiempo, el
Patriarca sugirió que las campañas de movilización para el
reconocimiento del Genocidio Armenio son parte de estrategias más
amplias y se utilizan como instrumentos de presión geopolítica. "Nos
hubiera gustado", agregó el nuevo Patriarca, "que los eventos
experimentados en estas tierras fueran tratados por las personas que
viven en estas tierras; nos habría gustado mejorar las relaciones entre
Turquía y Armenia. Y que las dos partes pudiesen dialogar entre sí.
Precisamente
porque ambas partes no se hablan entre sí, otros países, al otro lado
del Atlántico, reclaman el derecho a entrometerse en estos asuntos”.
En otras declaraciones relanzadas en los últimos dos días por los medios
de comunicación turcos, Sahak II recuerda la condición singular
experimentada por los armenios en Turquía, que los diferencia en parte
del resto de las comunidades armenias diseminadas por todo el mundo,
también con respecto a la memoria de los sangrientos eventos de 1915.
“Como armenios”, dijo el Patriarca de Constantinopla, "estamos
integrados en Turquía y hemos vinculado nuestro futuro con el de
Turquía. Estamos en armonía con todos los componentes de esta nación”.
La elección de vivir en Turquía, reconoció Sahak, implica una forma
especial de vivir la memoria de los sangrientos eventos experimentados
por los armenios en la Península de Anatolia (eventos que el Patriarca
nunca define públicamente con la expresión "Genocidio"). "Experimentamos
el trauma de 1915" enfatiza Sahak II "y lo hemos superado de alguna
manera, continuando a vivir aquí. Y, por
supuesto, nos preocupa la evolución política registrada fuera de la
comunidad armenia de Turquía. Y los sentimientos que esto provoca en
Turquía tiene el efecto de fomentar el odio”.