jueves, 26 de diciembre de 2019

Ángelus del Papa FRANCISCO en la Fiesta de San Esteban

CIUDAD DEL VATICANO (http://catolicidad.blogspot.mx - 26 de diciembre de 2019).-  A las 12:00 horas de hoy, Fiesta de San Esteban - diácono y primer mártir - el Santo Padre FRANCISCO desde la ventana de estudio en el Palacio Apostólico Vaticano ha rezado el Ángelus con los fieles y peregrinos reunidos en la Plaza de San Pedro.


Estas son las palabras del Papa antes de la oración mariana:


FIESTA DE SAN ESTEBAN PROTOMÁRTIR

PAPA FRANCISCO

ÁNGELUS

Plaza de San Pedro
Jueves, 26 de diciembre de 2019


Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!


Se celebra hoy la fiesta de San Esteban, primer mártir. El Libro de los Hechos de los Apóstoles nos habla de él (cfr cap. 6-7) y en la página de la liturgia de hoy nos lo presenta en los momentos finales de su vida, cuando es capturado y lapidado (cfr 6,12; 7,54-60). En la atmósfera alegre de la Navidad, este recuerdo del primer cristiano asesinado por la fe puede parecer fuera de lugar. Sin embargo en la perspectiva de la fe, la celebración de hoy está en sintonía con el verdadero significado de la Navidad. En el martirio de San Esteban, de hecho la violencia es derrotada por el amor, la muerte por la vida: en la hora del testimonio supremo, contempla los cielos abiertos y les da a sus perseguidores su perdón (cfr v. 60). 


Este joven servidor del Evangelio, lleno del Espíritu Santo, ha sabido narrar a Jesús con las palabras, y sobretodo con su vida. Al mirarlo vemos realizarse la promesa de Jesús a sus discípulos: “Cuando los maltraten por causa mía, el Espíritu del Padre les dará la fuerza y las palabras para dar testimonio” (cfr Mt 10,19-20). En la escuela de San Esteban, que se volvió similar a su Maestro tanto en la vida como en la muerte, también fijamos la mirada sobre Jesús, fiel testigo del Padre. Aprendemos que la gloria del Cielo, es aquella que dura para la vida eterna, no está compuesta de riqueza y poder, sino del amor y la entrega de sí.


Necesitamos mantener nuestra mirada fija en Jesús, «autor y perfeccionador de nuestra fe» (Eb 12,2), para poder explicar la esperanza que nos ha sido dada (cfr 1Pt 3,15), a través de los desafíos y de las pruebas que enfrentamos diariamente. Para nosotros los cristianos, el cielo no está muy lejano, separado de la tierra: con Jesús, el Cielo ha descendido a la tiera, Y gracias a Él, con la fuerza del Espíritu Santo, podemos tomar todo lo que es humano y dirigirlo al Cielo. De modo que el primer testimonio es precisamente nuestra forma de ser humanos, un estilo de vida plasmado según Jesús: suave y valiente, humilde y noble, no violento.  


Esteban era diácono, uno de los primeros siete diáconos de la Iglesia (cfr At 6,1-6). Él nos enseña a anunciar a Cristo a través de gestos de fraternidad y de caridad evangélica. Su testimonio, culminado en el martirio, es fuente de inspiración para la renovación de nuestra comunidad cristiana. Estamos llamados a ser siempre más misioneros, todos luchando por la evangelización,
decididos a llegar a los hombres y a las mujeres en las periferias existenciales y geográficas, donde haya más sed de esperanza y de salvación. Comunidades que no siguen la lógica mundana, que no se centran en sí mismos, en su imagen, sino únicamente en la gloria de Dios y el bien de la gente, especialmente de los pequeños y de los pobres.


La fiesta de este primer mártir Esteban nos llama a recordar a todos los mártires de ayer y de hoy, - ¡hoy hay tantos! - a sentirse en comunión con ellos, y a pedirles la gracia de vivir y morir con el nombre de Jesús en el corazón y en los labios. María, Madre del Redentor, nos ayude a vivir este tiempo de Navidad fijando la mirada en Jesús, para parecernos cada días más a Él.



Después del Ángelus


Queridos hermanos y hermanas,


me uno al dolor que invade a la querida población de las Filipinas a causa del tifón Phanfone. Rezo por las numerosas víctimas, por los heridos y por sus familias. Invito a todos a rezar conmigo el Ave María por este pueblo al cual amo tanto.


Ave o María, …


Saludo a todos vosotros, peregrinos provenientes de Italia y de todos los Países, La alegría de la Navidad que hoy llena nuestros corazones, suscite en todos el deseo de contemplar a Jesús en la gruta del pesebre, para luego servirlo y amarlo en nuestros hermanos, especialmente en los más necesitados.


En estos días he recibido muchos mensajes de felicitaciones de Roma y de otras partes del mundo. No me es posible responder a cada uno pero rezo por todos. Así que les expreso hoy a todos vosotros mi agradecimiento sincero, especialmente por el don de la oración que muchos de vosotros han prometido hacer: muchas gracias.


Buena fiesta de San Esteban. Por favor, continúen rezando por mí. ¡Buen almuerzo y adiós!


Link:
http://w2.vatican.va/content/francesco/it/events/event.dir.html/content/vaticanevents/it/2019/12/26/angelus.html


[Traducido del original italiano por http://catolicidad.blogspot.mx ]


© Copyright - Libreria Editrice Vaticana