Beirut, LÍBANO (Agencia Fides, 11/12/2019) - “Hermano, si no tienes dinero, no te
avergüences y no dejes a tu familia sin comida. Entra y toma lo que
necesitas: café, especias, cereales, porque Dios se preocupa por ti y
por mí". Este mensaje (véase foto), expuesto por el Sr. Abd Bitari en la
ventana de su supermercado en Nabatieh, en el sur del Líbano (área con
mayoría chiíta), se ha convertido en el símbolo del espíritu de
resiliencia de la población libanesa frente a la emergencia
político-económica que se está apoderando del país, expresada en
innumerables iniciativas espontáneas de solidaridad concreta en
beneficio de quienes más sufren los efectos de la crisis.
También ha contribuido en la ola de iniciativas espontáneas de
solidaridad, la emoción que despertó en todo el país el caso de un padre
de familia de la ciudad de Arsal, con su esposa enferma de cáncer, que
se suicidó después de endeudarse y no poder nisiquiera juntar mil libras
libanesas (equivalentes a 50 centimos de euro) que su hija le había
pedido antes de ir a la escuela.
La resiliencia de los libaneses se expresa de diferentes maneras. Hay
quienes ofrecen metano para la calefación a quienes no tienen dinero
para comprarlo, médicos y abogados garantizan asistencia gratuita a
quienes más lo necesitan, bancos de alimentos y productos farmacéuticos
surgen en diferentes áreas del país para recolectar alimentos y
medicamentos para redistribuirlos a las familias que más sufren.
La parroquia de San Juan Bautista en Beirut ha inaugurado, cerca de un
hospital, un "refrigerador móvil" desde el cual se distribuyen a quienes
solicitan bienes de primera necesidad. La emergencia económica también
condiciona y caracteriza las iniciativas de las parroquias y escuelas
cristianas que se preparan para celebrar la fiesta de Navidad. En la
parroquia de San Maroun en Haret Sakher, cerca de Harissa, los jóvenes
de la parroquia recolectan alimentos y medicinas para ayudar a las
familias que están en mayor dificultad. El consejo pastoral ha tomado la
decisión de reducir los gastos para las celebraciones navideñas y
asignar todo en ayuda de los más necesitados. Se ha creado un comité
especial para coordinar las intervenciones de caridad de la parroquia.
Los días de manifestaciones y bloqueos de carreteras han provocado el
cierre de muchas escuelas durante largas semanas, aumentando los
factores de crisis de muchas instituciones educativas promovidas por las
Iglesias. Para recuperar las horas de clase perdidas, las escuelas
permanecerán abiertas también el día de Nochebuena. Por su parte, el
Colegio Notre-Dame de Jamhour, dirigido por el Padre Charbel Batour, ha
emitido una declaración para sugerir a las personas que destinen a obras
de caridad, los fondos que normalmente destinan a comprar regalos para
Navidad.