En su discurso en lengua italiana, el Pontífice presentó la figura de San Domingo de Guzmán, Sacerdote y Fundador de la Orden de los Predicadores, del cual este día se recuerda su memoria litúrgica, refiriéndose en particular a su vida de oración.
Posteriormente saludó a los grupos de peregrinos en francés, inglés, alemán, español, portugués, polaco, checo, esloveno e italiano.
Estas fueron sus palabras en castellano:
"Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular a los jóvenes de la Archidiócesis de Pamplona y Diócesis de Tudela, acompañados por su Pastor, así como a los grupos provenientes de España, Venezuela, México y otros países Latinoamericanos. La Iglesia celebra hoy la memoria de Santo Domingo de Guzmán, hombre de oración y enamorado de Dios. Él nos recuerda que en la base de todo testimonio está la plegaria, pues en la relación constante con el Señor se recibe la fuerza para vivir intensamente cada momento, y afrontar incluso las mayores dificultades. Muchas gracias y que Dios os bendiga".
En italiano dijo:
"Envío un cordial saludo a los peregrinos italianos, en particular a las Hermanas de la Preciosísima Sangre y a las parejas de recién casados. Les agradezo su presencia, me complace invocar para cada uno de ustedes los abundantes dones del Espíritu Santo para un renovado fervor espiritual y apostólico. Gracias por su presencia y por su atención; que tengan un buen día y una buena semana. Gracias y felices vacaciones, para todos ustedes".
La Audiencia General concluyó con el canto del Pater Noster y la Bendición Apostólica impartida por S.S. Benedicto XVI.
