Quetta, PAKISTÁN (Agencia Fides,
16/06/2014) – “La cultura de la intolerancia genera terrorismo”,
por lo que esa es la raíz que se debe erradicar: lo ha dicho el
presidente de la Corte Suprema de Pakistán, el juez Tassaduq Hussain
Villani, al hablar en una reunión organizada en Quetta por el
Tribunal Superior de Baluchistán, al día siguiente del asesinato
del político cristiano Handry Masih. “¡Aquellos que promueven el
terrorismo, muestran una visión distorsionada del Islam. Estos han
creado un modo de pensar que necesita ser cambiado. El asesinato de
cualquier persona, independientemente de sus creencias religiosas, es
el asesinato de toda la humanidad”, ha remarcado.
Según la información de la
Agencia Fides, la comunidad cristiana en Quetta sigue sacudida por el
trágico suceso y ha organizado varios encuentros de oración. En una
nota enviada a la Agencia Fides, Farrukh Saif, director de la ONG
“World Vision in Progress”, activa en Baluchistán, ha condenado
el asesinato de Handry Masih, que era “un hombre de fe, que apoyaba
a la Iglesia”, pidiendo una urgente revisión de la política del
gobierno hacia las minorías religiosas en Pakistán.