“Debido a este acto ilegal y de barbarie, ahora las Ong que se ocupan de los cristianos paquistaníes están sufriendo”, señala a Fides el abogado cristiano Sarda Mushtaq Gill. “El trabajo de las Ong y de los defensores de los derechos humanos es no violento y pacífico: promovemos la paz, el amor, la verdad y la paciencia”, recuerda el abogado Gill, quien trabaja en la Ong LEAD (Leagal Evangelical Assistence and Development).
Según fuentes oficiales de la policía, los cristianos arrestados como sospechosos del linchamiento son 106. Con las investigaciones en curso, poco a poco algunos están siendo liberados. En una nota enviada a la Agencia Fides, Ataurehman Saman, Coordinador de las publicaciones de la Comisión Nacional “Justicia y Paz” de los Obispos pakistaníes (NCJP), afirma: “La nación ha pagado un tributo de 60 mil vidas por el terrorismo y el extremismo. En el mundo Pakistán es considerado como una guarida de terroristas. El único camino de salvación es garantizar la seguridad a las personas inocentes y poner fin a una política de negación o de encubrir los males del país”.