Penang, MALASIA (Agencia Fides, 20/11/2019) - Enseñar a los estudiantes la Biblia y el Corán
ayuda a fomentar el respeto mutuo entre las religiones, la aceptación y
la convivencia en Malasia, sostiene Norlela Ariffin, miembro musulmán
del People's Justice Party (PKR) elegida en la asamblea legislativa del
estado de Penang, en la Federación de Malasia. Según la mujer, la Biblia
en lengua malaya no debe considerarse “una amenaza” para la fe de los
musulmanes, sino más bien una oportunidad para comprender otras
religiones.
Desde 2017 organiza y dirige sesiones de estudio para estudiantes
musulmanes, en colaboración con el Departamento religioso del estado,
intentando establecer comparaciones entre el Corán y la Biblia. “Los
musulmanes no deberían pensar que solo con tocar una Biblia pueden
volverse impuros”. Por otro lado, la líder también organiza sesiones de
estudio similares para que los estudiantes no musulmanes entiendan mejor
el Islam.
La política defendió su posición cuando un líder de la oposición, Datuk
Muhamad Yusoff Mohd Noor, del Barisan National, llevó el tema a la
Asamblea Legislativa del estado. Según Ariffin, es apropiado que los
musulmanes entiendan otras religiones y conozcan otros textos sagrados,
también de los hindúes y los budistas. “Vivimos en una sociedad
multicultural, es importante que nos entendamos y que aprendamos más
sobre las creencias de los demás, para que no haya temor ni sospecha”,
indica.
Ariffin instó a los legisladores a rechazar los prejuicios y la
discriminación relacionados con la religión o el origen étnico llamando a
la paz, a la armonía y a la comprensión en el país. “Nadie tiene
derecho a polarizar la sociedad, más bien es necesario promover el
respeto, el amor y la aceptación de otras religiones”.
Malasia es un país multiétnico, multicultural y multirreligioso. Su
población está compuesta por casi 32 millones de personas, de las cuales
más del 60% son musulmanes de etnia maaya. Los católicos representan
solo el 4% de la población.