Concepción, CHILE (Agencia Fides, 15/02/2020) - Alrededor de 300 jóvenes de la 
Arquidiócesis chilena de Concepción han realizado las misiones de verano
 en varias comunidades durante los meses de enero y febrero, para apoyar
 la acción pastoral que se lleva a cabo durante todo el año. De esta 
manera, han querido responder a lo que el Papa Francisco les pide en su 
exhortación apostólica "Christus vivit", donde alienta a los jóvenes a 
ser misioneros valientes: “los jóvenes están llamados a dar testimonio 
del Evangelio en todas partes, con su propia vida… Sean capaces de ir 
contracorriente y sepan compartir a Jesús, comuniquen la fe que Él les 
regaló.” (nn.175-176).
Como informa la nota de la Conferencia Episcopal recibida en Fides, 
muchas áreas rurales y urbanas, como la prisión de Arauco o la Isla de 
Chiloé y la Isla de Santa María, han sido tocadas por el entusiasmo y la
 alegría de los jóvenes misioneros, quienes han llevado hasta esas zonas
 su testimonio. En los días de la misión, los jóvenes han visitado cada 
casa del sector que tenían encomendado, organizando reuniones con la 
comunidad local, en un ambiente de gran fraternidad y fervor espiritual y
 con la celebración de la Eucaristía como momento principal de cada día.
El vicario de la Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis de Concepción, el 
padre Víctor Álvarez, ha comentado al respecto: "asumiendo la 
responsabilidad de su misión, en la Iglesia y en el contexto social en 
el que vivimos como nación, los jóvenes han viajado para compartir su fe
 y su esperanza en cada zona misionera". Cada área de misión ha podido 
contar también con el apoyo de algunos sacerdotes y religiosos, que 
participan en los diferentes sectores de la pastoral y en varios 
lugares, fortaleciendo así la dimensión espiritual y el encuentro con 
Jesucristo que es la base de todo lo que se ha realizado en estos días.