El 22 de Enero Mons. Martin Rabago lanzó esta petición a los miembros de la criminalidad organizada: "Deben colaborar teniendo en cuenta que todas estas personas vienen a un acto que es totalmente respetable. No aprovechen para hacer nada que de alguna manera pudiera llevarnos a una experiencia de duelo y muerte".
No es la primera vez que la Iglesia católica pide una tregua a los narcos. En Diciembre de 2010, el Cardenal Juan Sandoval Íñiguez ya lo había hecho dos veces. En pasado agosto, la Conferencia Episcopal Mexicana solicitó que se consintiese de una manera pacífica, la peregrinación de las reliquias de Juan Pablo II en el país.
El 28 de Enero, el Nuncio Apostólico en México, el Arzobispo Mons. Christophe Pierre, ha declarado que la Iglesia no ha pedido una tregua, sino que "pedimos un cambio de mentalidad". El mismo llamamiento fue hecho por el Secretario General de la Conferencia Episcopal Mexicana, Mons. Víctor René Rodríguez Gómez, Obispo Auxiliar de Texcoco.