jueves, 12 de marzo de 2015

Obispos católicos: "Reconstruir Gaza, sostener las escuelas, ayudar a los refugiados e inmigrantes"

Jerusalén, TIERRA SANTA (Agencia Fides, 12/03/2015) – Un llamamiento urgente a la “reconstrucción de Gaza para ayudar a las miles de familias que se han quedado sin hogar tras el último conflicto”, un recordatorio de la importancia de la labor educativa de las Escuelas Cristianas, amenazadas por los recortes de las subvenciones, y un compromiso renovado de las realidades eclesiales en el apoyo a los refugiados iraquíes e sirios y a los inmigrantes de África y Asia. Estos son los puntos principales que se han discutido en la última reunión semestral de los Obispos Ordinarios Católicos de Tierra Santa, que se ha celebrado los días 10 y 11 de marzo en el Convento Franciscano de Jerusalén. La reunión ha contado con la presencia de los obispos católicos de Jordania, Palestina, Israel y Chipre. Entre los temas que se han tratado en las sesiones estaban también los relacionados con el trabajo pastoral que hay que realizar en vista de la próxima canonización de las dos beatas palestinas, la hermana Marie Alphonsine Ghattas y la carmelita Mariam Bawardi, que se celebraran en Roma el 17 de mayo, y del próximo Sínodo sobre la familia en octubre. 

En el comunicado final de la reunión, dado a conocer por el Patriarcado Latino de Jerusalén, se expresa preocupación por el futuro de las escuelas cristianas en Israel, afectadas por “los recortes a las subvenciones de la Consejería de Educación”. Se hipotiza también sobre una mayor participación de los padres para el apoyo financiero de las escuelas, en la convicción de “que el propósito preciso de nuestras escuelas no es el lucro, sino la educación”. El documento reafirma la intención de la Iglesia a hacerse cargo de “los inmigrantes asiáticos y africanos que viven en una situación precaria” marcada por la explotación, la discriminación y la falta de protección de sus derechos fundamentales. 

En cuanto a la condición de los refugiados provenientes de Siria e Iraq, los obispos subrayan que la mayoría de ellos no parecen tener ninguna esperanza de un posible regreso a sus países marcados por grandes conflictos sangrientos. Los recursos empleados por Caritas - advierten los Obispos – disminuyen con la prolongación de la crisis. Y el deterioro progresivo de las condiciones de vida de millones de refugiados y desplazados llama en causa cada vez más apremiantemente las responsabilidades de la comunidad internacional y de la ONU.