“En el caso de North Rift hemos advertido reiteradamente que el conflicto está empeorando, sobre todo después del descubrimiento de petróleo y de otros minerales. Cientos, si no miles de vidas se han perdido en este perenne conflicto que ha sido erróneamente llamado 'robo de ganado'”. Una alarma que ha sido lanzada de nuevo en la conferencia de prensa de presentación de la declaración.
Ante la situación de inseguridad, los obispos recuerdan al gobierno su responsabilidad: “No vamos a dejar de llamar al gobierno a cumplir con su mandato constitucional y proteger a los keniatas. Un gobierno que no puede proteger a su propio pueblo pierde la legitimidad para gobernarlo”.
Los obispos también han denunciado la corrupción “que está casi paralizando no sólo la economía, sino a todo el país” y han pedido al Presidente hacer frente a los casos de corrupción de una manera rápida, justa y definitiva. El documento por último también denuncia la adopción ciega de ideologías autodestructivas que amenazan a la familia.