Bangassou, REPÚBLICA CENTRO AFRICANA (Agencia Fides, 30/12/2016) – Su Exc. Mons. Juan Jose Aguirre, M.C.C.I.
Obispo de la diócesis de Bangassou en la República Centro-africana, ha
publicado una reflexión con motivo de la Navidad, recibida en la Agencia
Fides a través de las Obras Misionales Pontificias de España, de la que
publicamos algunos pasajes a continuación.
“Veo el mapa mundi, paso mis yemas por las aguas del Mar Mediterráneo, y
pienso en aquellos a los que les toque estar pasando sus negruras en la
noche del 24. Navidades negras. nuestro Mar se ha convertido en
cementerio para más de 5.000 personas, sus aguas ya no son tan azules,
sus olas traen presagios de tristeza. La muerte acecha allí cada día.
Mi dedo se aleja hacia el Líbano y luego Siria, Alepo, ¿qué navidades
van a vivir allí? Los hermanos maristas tenían un orfanato en el barrio
ocupado por la guerrilla. Navidades heroicas. Los hombres de la Cruz
blanca (musulmanes) no dan abasto con sus ambulancias para sacar gente
de entre los escombros, niños desfigurados, familias desmembradas... Hay
escuelas que se han hundido sobre los alumnos machacándolos a todos.
En el norte de Nigeria hay miles de personas sometidas por Boko Haram,niñas raptadas, pueblos carbonizados por el horror.
En Centro-áfrica serán navidades calientes Grupos rebeldes musulmanes se
baten entre ellos desde hace semanas. Guerra por el poder, por el
control de la guerrilla…Navidades tensas, cargadas de miedo y de
violencia, de obuses y de metralla, que traen su aliento fétido hasta
las puertas de Bangassou. Los rebeldes están a 70 kms de nosotros. Miles
de civiles han llegado a la misión de Nzacko (tengo allí dos curas)
huyendo de la quema en el norte de Bambari...
Navidades tristes en casa de la misionera catalana Isabel
Solá, asesinada también en Haití el pasado 2 de septiembre , o en Yemen
donde el 4 de marzo pasado, milicias chiitas radicales asesinaron a 4
misioneras de la Caridad.
Pero también navidades de gozo y esperanza para los millones de "buena gente" repartida por el mundo.
Navidades diferentes en muchas capillas de selva, en decenas de países
de África y también en miles de pueblos de selva en Perú, Colombia o
Ecuador, sin luz ni contaminación, serán navidades de oración, de
estupor, porque en África no hay “comida de Navidad” ni botellón
posterior...”