CIUDAD DE MÉXICO (Agencia Fides, 19/05/2017)
– La Arquidiócesis de México ha publicado un
comunicado sobre las condiciones de salud del padre José Miguel Machorro
Alcalá, de 55 años, quien fue apuñalado mientras oficiaba una Misa en
la Catedral Metropolitana el pasado lunes 15 de mayo.
Según el informe médico del 17 de mayo por la tarde, recibido en la
Agencia Fides, “al recobrar el estado consciente se hizo aparente una
parálisis de todo el lado derecho del cuerpo, como consecuencia de un
daño en el hemisferio cerebral izquierdo (infarto cerebral), debido a la
falta de irrigación por la hemorragia severa que sufrió”.
En la mañana del 18 mayo otro informe médico confirmó que
“lamentablemente la condición neurológica ha empeorado y tiene falta de
riego sanguíneo”. Los médicos han explicado que la bradicardia es una
señal de advertencia, ya que es el cerebro que controla el ritmo
cardíaco, por lo tanto, el estado de salud es delicado.
En cuanto al agresor, el Procurador General de la Ciudad de México ha
informado que, en el momento de su detención, dijo que su nombre era
John Rockschild y que era de origen francés, mientras que su nombre real
es Juan Martinez René Silva, y es originario de Matehuala, San Luis
Potosí. Las primeras pruebas han demostrado que Silva Martinez, de 26
años, sufre de un trastorno psicótico que combinado con su obsesión por
un vídeo juego (Assassin 's Creed), habría podido llevarlo a arremeter
contra el sacerdote, ya que no puede distinguir entre fantasía y
realidad.