El Paso, ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA (Agencia Fides, 16/02/2016) – Este lunes 15 de febrero, a las 11 a.m., hora
local, cientos de familias y residentes de la zona fronteriza entre
México y Estados Unidos se han reunido en ambos lados de la valla
fronteriza Anapra/Sunland Park, por la imposibilidad de poder ir mañana,
17 de Febrero, a Ciudad Juárez, para participar en la visita del Papa
Francisco. “Ha sido una ocasión importante para las familias de
inmigrantes centroamericanas que no pueden ir a Ciudad Juárez, México,
para expresar sus sentimientos y luchas a las que se enfrentan para
poder vivir en los Estados Unidos, en un momento en que prevalece
políticas y prácticas xenófobas” se lee en el comunicado enviado a la
Agencia Fides por la Red Fronteriza por los derechos Humanos.
Frente a la red que divide ambos países, han compartido varios
testimonios sobre las normas actuales que afectan la vida de millones de
habitantes en la región fronteriza entre EE.UU./México.
“El evento histórico y único de la visita del Papa en nuestra región -
continúa el comunicado - será utilizado para resaltar los problemas que
afectan a las familias inmigrantes en los Estados Unidos, tales como los
procesos de separación familiar de los refugiados y solicitantes de
asilo, el abuso de autoridad, las muertes de los migrantes, etc.,
también hablaremos de la creciente militarización de las fronteras, del
racismo y de la criminalización de los inmigrantes”.
Según con el programa de la visita, el Papa Francisco pasará cerca de la
frontera marcada por la malla de alambre, y se acercará a saludar a los
que están al otro lado. A los 16 horas, celebrará la misa en la zona de
la feria de Ciudad Juárez: el palco está a 80 metros de la frontera, y
se espera que en la parte estadounidense estén decenas de miles de
personas en El Paso, mientras que en el lado mexicano se esperan otras
200 mil personas.